La provincia de Santa Fe quedó en el medio del ojo de la tormenta por la polémica con el juego clandestino. Las declaraciones del ex fiscal Ponce Asahad, detenido por recibir coimas del juego clandestino, dejaron al descubierto las maniobras ilegales que se daban o se dan en el territorio santafesino.
Además, el ex funcionario del Ministerio Público de la Acusación de Rosario, involucró en su declaración como arrepentido, varios "pesos pesados de la política", entre ellos el senador por el departamento San Lorenzo, Armando "Pipi" Traferri. Lo revelado por Ponce Asahad provocó que los fiscales Schiappa Pietra y Edery comiencen a investigar al legislador que mantiene su banca desde hace 30 años.
Esto produjo un sin fin de noticias, entre acusaciones de un lado y del otro. Rápidamente, Traferri se presentó ante la Justicia, declaró y se puso a disposición. Además, en una conferencia de prensa, el propio senador y su abogado, indicaron que las acusaciones, donde lo vinculan como jefe de la banda que organiza el juego clandestino, se trataban de operaciones políticas y "operetas" por parte del ministro de Seguridad, Marcelo Sain.
Los fiscales encargados de investigar presentaron esta semana un pedido al Senado de Santa Fe para que le retiren los fueros a Traferri. Sin embargo, los funcionarios del MPA recibieron un duro revés luego de que en la sesión de este viernes, los pares del "Pipi" rechacen esta petición.
Luego de la sesión en la Cámara de Senadores, se dieron a conocer algunos de los registros telefónicos con los que los fiscales Edery y Schiappa Pietra presentaron como prueba. En estas escuchas, se puede escuchar en reiteradas ocasiones el nombre de Armando Traferri.
Asimismo, en una de ellas se destaca la siguiente frase: "Deja de hablarme por teléfono que vamos a terminar todos en Cincinnati, demente".
