Los casos con fiebre y las hospitalizaciones de urgencia por Covid-19 tocaron techo en China y el número de pacientes hospitalizados por la enfermedad sigue disminuyendo, dijo el sábado un funcionario sanitario.
En todo el país, "el número de pacientes que acuden a las clínicas por fiebre sigue una tendencia general descendente tras haber alcanzado su máximo, tanto en las ciudades como en las zonas rurales", declaró en rueda de prensa Jiao Yahui, funcionario de la Comisión Nacional de Sanidad.
Jiao sostuvo que el número de pacientes en tratamiento de urgencia también está disminuyendo y que la proporción de pacientes que había dado positivo en las pruebas de COVID-19 también cae de forma constante.
El número de casos graves también ha alcanzado su punto máximo, añadió, aunque se mantiene en un nivel elevado, y los pacientes son en su mayoría ancianos.
Wen Daxiang, funcionario de la Comisión de Salud de Shanghái, declaró que China reforzaría la vigilancia sanitaria y la gestión de la población de alto riesgo.
Añadió que se reforzará el suministro de fármacos y equipos médicos, así como la formación de trabajadores médicos de base para combatir el COVID en las regiones rurales.