El mandatario de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, le propondrá al presidente Alberto Fernández la creación de una línea especial de financiación a las empresas brasileñas que le venden a Argentina en monedas locales y así mantener el flujo del comercio bilateral entre los dos principales socios del Mercosur, anunció el viceministro de Economía brasileño, Gabriel Galípolo.
"Estamos proponiendo la creación de una financiación a las empresas brasileñas que venden a la Argentina y son esas empresas que venden servicios y mercaderías de Brasil dadas las restricciones que se verifican en Argentina", dijo Galípolo, coautor del proyecto, con el ministro de Economía, Fernando Haddad, para crear una moneda común de comercio exterior sudamericana llamada "Sur".
El presidente Fernández es esperado en Brasilia para reunirse con Lula este martes y el equipo económico de ambos países para discutir cómo evitar las restricciones provocadas por la falta de dólares de este lado de la frontera.
Según Galípolo, Brasil ha dejado en los gobiernos de Michel Temer y de Jair Bolsonaro de financiar sus exportaciones y mecanismos de compensación con Argentina, lo cual permitió el avance de China como principal vendedor de los argentinos.
"En los últimos cinco años, debido a la falta de mecanismos de Brasil para financiar las exportaciones brasileñas y las importaciones argentinas, hemos perdido aproximadamente US$ 6.000 millones de espacio en la balanza comercial con Argentina a China, que ha estado proporcionando mecanismos de financiación en medios alternativos de pago, como swap, o dando crédito al exportador", dijo el funcionario a la cadena de noticias GloboNews.
Galípolo destacó que, para Brasil, Argentina es un mercado exportador diferenciado ya que consume productos de valor agregado, que son necesarios para mantener el empleo brasileño.
Según el número dos de Economía de Brasil, la necesidad de esta línea de crédito se agrava este año debido a una sequía en Argentina, que redujo las exportaciones en 40%: una pérdida de alrededor de US$ 17.000 millones.
Las exportaciones de Brasil, sin embargo, no sufrieron: de hecho, crecieron. Durante el primer trimestre, las importaciones desde Brasil alcanzaron los US$ 3.923 millones (+23,5% interanual).
"Esto perjudica un poco la situación de Argentina este año. Pero para Brasil tenemos 210 empresas que comercian con el país, principalmente en valores industriales, con más valor agregado", dijo, destacando la importancia de la medida.
El Gobierno de Brasil propondrá que estas líneas de financiación a la exportación sean pagadas directamente a las empresas brasileñas en reales. Los bancos centrales estarían en el medio de la transacción. El BCB y el BCRA realizarían un depósito en su moneda local que financiaría las exportaciones de cada uno. Así, cuando se hace la exportación, el exportador recibe el pago en su moneda sin demoras. El mayor reto es la convertibilidad de la moneda, sobre todo del peso.
Fuente: El Economista