El expresidente Luiz Inácio Lula da Silva (2003-2011) criticó la negativa del Gobierno a exigir el pasaporte sanitario de vacunas contra el coronavirus para los viajeros que llegan a Brasil, objeción a la que se sumó el gobernador de San Pablo, Joao Doria, y culpó al mandatario Jair Bolsonaro de "por lo menos la mitad de las muertes" por el virus que se registraron en el país.
"Ellos (Bolsonaro y su familia) tienen que tener responsabilidad y permitir que las personas sean obligadas a presentar el test de vacunas para proteger a la sociedad brasileña", afirmó Lula en un evento con sindicalistas, según recogió el diario Folha de São Paulo y reprodujo la agencia de noticias Sputnik.
Un día antes, el Gobierno decidió exigir una cuarentena de cinco días a los extranjeros no vacunados que entren en Brasil, desoyendo las recomendaciones de la Agencia Nacional de Vigilancia Sanitaria (Anvisa) que pedía implantar la obligatoriedad de la inmunización.
En este sentido, Lula recordó que en un reciente viaje a Europa pasó por Alemania, Bélgica, Francia y España, y en todos estos países tuvo que someterse a pruebas de PCR y probar que estaba inoculado, por lo que Brasil debería exigir lo mismo.
"Ese presidente nuestro es un genocida, culpable de, por lo menos, la mitad de las personas que murieron", denostó.
En sintonía con Lula se expidió hoy Doria, quien advirtió que va a adoptar medidas para evitar que Brasil se torne el "paraíso de los negacionistas" que podrían viajar al país por el permiso de ingreso otorgado por Bolsonaro y "pese al surgimiento de la nueva cepa Ómicron".
"Brasil no puede ser el paraíso del negacionismo, el turismo de negacionistas está sólo en la cabeza del ministro de Salud (Marcelo Queiroga) y en la del presidente de la República", aseveró Doria, del opositor Partido centroderechista Socialdemocracia Brasileña (PSDB).
El dirigente afirmó que si el gobierno nacional insiste en impedir el certificado de vacunación, el estado de San Pablo lo exigirá en sus aeropuertos internacionales.
Los aeropuertos de Guarulhos y Viracopos, ambos paulistas, están entre las principales terminales internacionales del país.
Doria señaló que los aeropuertos son "propiedad del gobierno federal" pero se encuentran dentro "del territorio del estado de San Pablo y esto es de responsabilidad del estado de San Pablo, que tiene atribuciones para exigir el "pasaporte vacunal".
Finalmente, advirtió que si hasta el 15 de diciembre Bolsonaro no implementa el "pasaporte" a partir del "día 16 nosotros adoptaremos el pasaporte vacunal".
"Por determinación del Supremo Tribunal Federal cabe a los gobiernos estaduales el gerenciamiento de la pandemia", destacó Doria, citado por la agencia de noticias ANSA.
Brasil, el tercer país más afectado del mundo por la pandemia detrás de Estados Unidos e India, acumula 22,2 millones de casos y más de 616.000 fallecidos desde el inicio de la emergencia sanitaria, según datos oficiales.
Y varios estudios apuntan a que el gigante sudamericano podría haber evitado muchas muertes si al principio de la pandemia si se hubieran implantado más restricciones.
Fuente: Telam