Por primera vez en la historia de las relaciones birregionales, la Unión Europea reconoció oficialmente en una declaración conjunta, la posición de América Latina y el Caribe con respecto a la Cuestión de las Islas Malvinas, que resalta la importancia del diálogo y el respeto al derecho internacional en la solución pacífica de controversias.
Tanto la Unión Europea como la CELAC reafirmaron su compromiso con el respeto a la integridad territorial y la solución de controversias por medios pacíficos, y saludaron la proclamación de América Latina y el Caribe como Zona de Paz.
Adolfo Schweighofer, presidente del Centro de Excombatientes, dio su opinión acerca de la noticia y sostuvo que "éstos son pequeños pasos y logros diplomáticos".
Además, insistió con que "el tema Malvinas debe ser una política de estado".