A casi tres meses de cerrar sus puertas, natatorios privados de la ciudad de Santa Fe piden volver a la actividad. Sostienen que el gobierno provincial y municipal no les da respuestas al protocolo de seguridad e higiene que presentaron en el Ministerio de Salud y que las finanzas "están por el suelo".
En diálogo con Veo Noticias, Ariel Callen, dueño de gimnasio Hard, expresó: "Hemos presentado un protocolo que no ha tenido objeción pero que no ha tenido respuestas. Nosotros estamos de rodilla y nos queremos levantar, por eso queremos que alguien nos escuche".
"Falta que baje de provincia la habilitación para que municipalidad nos autorice. Quedamos invisibilizados después de la habilitación de gimnasios, y los natatorios no tenemos respuestas", agregó,
Asimismo indicó que "el tema del medio acuático, según la OMS, no es un medio de contagios. Por eso no entendemos el por qué no, hay una decisión de no porque no". Y concluyó: "No queremos ser rehén de una decisión de un grupo de clubes que no les da la ecuación. Pedimos que liberen la actividad y que cada lugar lo resuelva a su manera".