El Gobierno de Santa Fe avanza en el plan de refuncionalización del sistema penitenciario y confirmó el traslado definitivo de las internas alojadas en la Unidad N° 4 de la capital provincial hacia la nueva Unidad Penitenciaria N° 9 de Recreo.
Según las estimaciones oficiales, la obra presenta un avance del 60% y se prevé que esté finalizada para mayo de 2026. Esta medida busca dar una solución de fondo a las condiciones de alojamiento de la población penal femenina, reemplazando al histórico edificio de barrio Sur, cuya construcción data de 1922 y que ya no cumple con los estándares necesarios de habitabilidad y seguridad.
El futuro de la Lavandería
Uno de los interrogantes sobre el traslado giraba en torno al funcionamiento del tradicional servicio de lavandería que operan las internas y que es utilizado por gran parte de la comunidad santafesina.
En diálogo con Veo Noticias, la secretaria de Asuntos Penales de Santa Fe, Lucía Masneri, despejó las dudas y confirmó la continuidad del taller. La funcionaria explicó que el servicio se reinstalará en las nuevas instalaciones de Recreo, las cuales contarán con una planta industrial propia, aunque la logística se mantendrá vinculada a la capital.
Masneri detalló que, si bien el trabajo de lavado se realizará en la Unidad 9, “se articulará el traslado hacia la ciudad de Santa Fe” para que los clientes puedan entregar y retirar las prendas, posiblemente manteniendo un punto de recepción en la vieja unidad de calle Uruguay.
Un edificio moderno para 880 reclusos
La nueva Unidad Penitenciaria Nº 9 cuenta con un presupuesto superior a los 43 mil millones de pesos y una superficie de más de 12 mil metros cuadrados. El complejo albergará tanto a hombres como a mujeres, divididos en minipenales.
La Subunidad 1, destinada específicamente a mujeres, tendrá 139 celdas y contará con sectores diferenciados: un pabellón para madres con hijos, áreas de educación y salud, sistemas de tecnología avanzada: cámaras con inteligencia artificial y escáneres y termotanques solares y climatización.
“Las 320 nuevas plazas van a resolver la situación de alojamiento para mujeres de manera definitiva, tanto para las que hoy están en la cárcel de Santa Fe como para las alojadas en comisarías y las que fueron trasladadas desde Rosario”, señaló Masneri.
El destino del edificio de Barrio Sur
Una vez que se concrete el traslado en 2026, el edificio de calle Uruguay al 2600 dejará de alojar detenidas, pero seguirá bajo la órbita del Ministerio de Justicia y Seguridad.
El lugar pasará a cumplir un rol netamente administrativo, albergando la ampliación de las oficinas de la Dirección General del Servicio Penitenciario. Además, Masneri adelantó un proyecto para preservar la memoria de la institución: “Vamos a convertir un sector en un Museo del Servicio Penitenciario, que tiene 93 años y actualmente no cuenta con un espacio propio para recuperar su historia”.
