Por Juan Trento
En las últimas horas se realizó un allanamiento en una vivienda ubicada sobre calle Solís al 600 de la localidad de Puerto Gaboto en el departamento San Jerónimo, y que tuvo como disparador una denuncia de una mujer por amenazas. La investigación llevó a los policías a allanar la vivienda, y cuando revisaron debajo de la cama secuestraron bultos que contenían casi 30 kilos de cocaína, conforme a los exámenes de narcotest que luego hicieron técnicos peritos antinarcóticos de la Agencia de Investigación Criminal AIC. En el mercado negro el kilo de cocaína en esa región cuesta alrededor de 7 mil dólares por kilo (210 mil dólares los 30 kilos), más de 63 millones de pesos (Dólar $ 300).
Cocaína
El puestero rural que manejaba animales en una isla, que fue identificado como D. T. y apodado Pete, de algo más de 30 años, aún no fue localizado. El hallazgo de los estupefacientes en esa cantidad llamó la atención de los policías de la Unidad Regional XV San Jerónimo -Orden Público y Cuerpos- que realizaron el allanamiento, y que inmediatamente reportaron la insospechada derivación al fiscal Aquiles Balbi. Posteriormente, y para certeza de la fundada sospecha que se trataba de estupefaciente y en presencia de testigos, se realizó el narcotest sobre la sustancia por parte de los técnicos peritos antinarcóticos de la AIC, y éstos constataron que se trataba de cocaína y su peso fue de casi 30 kilos.
Buscado por la Policía y por los narcos
El morador de la vivienda y principal investigado por el delito de amenazas no fue hallado, y se desconoce su paradero. El cargamento hallado y secuestrado en su casa por la Policía, no solo lo mantiene en su condición de prófugo, respecto de los policías que continuaban su búsqueda, y seguramente de los narcotraficantes para los que trabajaba porque perdió 30 kilos de cocaína valuados en el mercado negro a razón de 7.000 dólares el kilo en esta zona del país, que arrojaron un total de 210 mil dólares o 63 millones de pesos. D. T. debería entregarse a la Policía y salvar su vida, antes de que lo encuentren sus patrones narcos.
Cadena de custodia
informaron la novedad sobre la ocurrencia y derivación del procedimiento con el secuestro de los estupefacientes a la Jefatura de la Unidad Regional XV y de la AIC, y éstos hicieron lo propio con el juez federal subrogante N° 2 Villafuerte Ruzzo, que ordenó el secuestro con cadena de custodia de los 30 kilogramos de cocaína secuestrado.
