Los vecinos y vecinas de barrio El Pozo vienen manifestando su preocupación respecto al crecimiento irregular del asentamiento que se encuentra ubicado cerca de la playa, fuera del área de la defensa. Desde el barrio señalan que esto es un problema que viene profundizándose hace varios años, y sostienen que dentro de estos asentamientos se estarían realizando hechos ilícitos como la venta de drogas.
Una vecina de barrio El Pozo conversó con Veo Noticias acerca de la situación y manifestó que "hay mucha preocupación".
"El barrio lamentablemente tiene un barrio paralelo debajo de las defensas, cosa que está totalmente prohibida, porque las defensas no se pueden tapar", explicó.
La vecina comentó que en esa zona hay terrenos municipales, terrenos privados y terrenos que pertenecerían a un "señor que vive en el barrio, que fue policía y está jubilado hace muchos años" y que los estaría vendiendo a "un costo muy barato para que se siga agrandando el asentamiento".
"Esto empezó en el 2003 después de la inundación terrible. En el 2005, cuando desalojaron Villa Corpiño, esta gente también se vino para acá. Ellos pretenden ser un anexo de barrio El Pozo", agregó.
"Las autoridades toman parte, pero después queda todo en la nada. Hay un concejal que se está ocupando junto con el secretario de Hábitat", comentó la vecina respecto del reclamo para que las personas que viven en el asentamiento puedan ser reubicadas.
Además, sostuvo que estos asentamientos, por la cercanía con el barrio, tienen acceso al SAMCO, a las escuelas, la parroquia y "tienen muchos servicios", salvo luz y agua, que según su relato, se encontrarían "enganchados" del servicio eléctrico.
"Era un barrio muy tranquilo y había muchísima arboleda, porque eso colabora con el medio ambiente para contener el agua cuando sube el Paraná. Ahora está devastado", dijo la vecina de barrio El Pozo.
Por otro lado, narró de un hecho ocurrido días atrás cuando se asentó "un rancho con ruedas", y tras la denuncia de los vecinos y la llegada del 911, apareció "una camioneta blanca, que lo enganchó y se lo llevó".
Por último, la vecina sostuvo que el problema fundamental es la venta de droga, y señaló que "hay autos de alta gama en los fines de semana, hay un kiosco que tiene una cocina que vende droga a muy buen precio y de muy buena calidad".