La Organización Mundial de la Salud (OMS) indica que actualmente el virus de la rabia afecta a aproximadamente 150 países, principalmente de Asia y África. Para prevenirla se inmuniza a los animales con vacunas basadas en virus inactivados, pero para su producción se emplea el virus activo, proceso que puede aparejar riesgos a quienes las fabrican. Sin embargo, investigadores de la Universidad Nacional del Litoral (UNL) proponen un proceso novedoso y considerado bioseguro.
A 130 años desde que Luis Pasteur usara por primera vez su vacuna contra la rabia basada en virus inactivados, científicos santafesinos producen un nuevo sistema de producción que además propone la optimización de los costos para llegar más fácil al mercado. “Hicimos este tipo de vacunas VLP (Virus Like Particles o Partículas Similares a Virus), pero también tenemos pensado trabajar en otras para hepatitis B, que seguramente comenzaremos en 2016”, contó Claudio Prieto, del Laboratorio de Desarrollos Biotecnológicos y del de Cultivos Celulares de la Facultad de Bioquímica y Ciencias Biológicas (FBCB) de la UNL.