Un psicólogo fue detenido el fin de semana en su casa luego de no acudir al citatorio de la Justicia para declarar en una causa de abuso sexual a una menor de edad, luego fue trasladado a Rosario. Desde SIPRUS, el gremio del que forma parte, aseguraron que se trató de un “mensaje intimidatorio y disciplinador”.
Leandro Goldsack atendió a la niña víctima de abuso sexual en el Hospital Mira y López hace tres años, el Ministerio Público de la Acusación investigó el hecho y la causa llegó a juicio. En ese contexto, el profesional fue citado por la justicia para declarar pero asistió.
La fiscal de la unidad fiscal de Violencia de Género, Familiar y Sexual (Gefas), Alejandra Del Río Ayala, explicó los alcances del secreto profesional y aseguró que todo los profesionales pueden acogerse al derecho pero, de igual manera, deben presentarse y responder al citatorio; luego sí pueden negarse a prestar testimonio.
"Es un delito no comparecer y no declarar cuando tuvieran obligación de hacerlo, está previsto en el Artículo 243 del Código Penal. Tiene una pena muy baja, lo que es lógico, pero no deja de ser un delito. Y yo creo que se potencia cuando quienes incurren en esos delitos son personas que tienen una doble obligación o una obligación especial, porque la verdad es que en estos casos tenemos una obligación internacional de dar respuesta a casos de violencia de género".
Además agregó que "son casos muy complejos, no es fácil investigar delitos sexuales cuando muchas veces, en un alto porcentaje diría yo, el abuso es intra familiar, y gran parte del grupo familiar o al menos una parte del grupo familiar se ve resquebrajado por el develamiento de estos casos va en contra de la actuación de la justicia".
