En la mañana de este sábado ante la presencia de la directora del Hospital, Silvina Fincochietti, quedaron habilitadas ocho habitaciones para atención de pacientes COVID en el nuevo efector.
Acompañaron a la funcionaria el Doctor Marcelo Calvet que será el coordinador del nuevo efector y el doctor Matías Zurawski, actual responsable del tratamiento de pacientes con coronavirus en la ciudad.
«Viendo la situación que estamos viviendo en la localidad y la región era necesaria la habilitación para el sostenimiento de internación de pacientes que en algún momento requieran internación» dijo Finochietti.
«Sabemos que nosotros somos un segundo nivel y ante cualquier situación de desmejora de los pacientes tenemos que referenciarnos en Hospitales como el Cullen o Iturraspe» agregó la directora.
«La situación, que iba a ser un poco más holgada, determinó que ante la presencia de contagios en el geriátrico, debamos estar preparados para cualquier eventualidad. Estamos habilitando las camas monitoreadas, con oxigenoterapia por cualquier situación» dijo Finochietti.
En la coordinación todavía se buscan profesionales para poder terminar de armar los equipos que trabajen en el nuevo nosocomio.
Para ellos se abrió una inscripción de enfermeros y la respuesta fue bastante buena: hubo unas 13 personas inscriptas. No es fácil conseguir médicos como enfermeros en esta situación.
«Se demoró un poco la convocatoria por pasos burocráticos. Cuando se agotó el escalafón de Coronda, necesitábamos una autorización para hacer un llamado fuera de la junta para hacer un llamado fuera de ella. Comenzamos a tener gente que se inscribió que no están escalafonados pero que necesitan trabajar» explicó la directora. «De igual manera, nos siguen faltando» finalizó.