Un agente del Servicio Penitenciario, de 38 años, iniciales EMMM, quedó en prisión preventiva, imputado por el intento de robo cometido en una estación de servicios en la ciudad de Santa Fe. Así fue dispuesto por el juez de la Investigación Penal Preparatoria (IPP), Nicolás Falkenberg, en una audiencia realizada en los tribunales de la capital provincial.
El delincuente logró apoderarse del botín, pero cuando intentaba darse a la fuga, el trabajador reaccionó con rapidez. Lo empujó de la moto, se trenzó en un forcejeo con el agresor y consiguió arrebatarle tanto el cuchillo como las llaves del vehículo. Durante el forcejeo, el casco del atacante se desplazó y dejó al descubierto su rostro, lo que permitió al empleado reconocerlo como un cliente frecuente de la estación.
A pesar de haber sido desarmado, el asaltante logró reincorporarse, subirse nuevamente a la moto y huir del lugar. No obstante, la policía logró interceptarlo minutos después en calle La Paz, entre Luciano Molinas y Pasaje Leiva, en Barranquitas.
El guardiacárcel presta servicios en la Unidad Nº 2 del penal de Las Flores, y ostenta el rango de ayudante. Al momento de la detención, presentaba lesiones visibles en el rostro y fue derivado al hospital José María Cullen, donde se le diagnosticó un posible traumatismo de cráneo leve.
Al ser aprehendido, el hombre aseguró que “era una joda” porque conocía a la víctima, aunque esa versión fue rápidamente descartada por los efectivos. La causa quedó a cargo de la justicia, bajo la carátula de tentativa de robo calificado.


