La reina Máxima Zorreguieta siempre da de qué hablar. La argentina deslumbra en cada aparición pública que realiza en todo el mundo, y en especial en los Países Bajos. Sin embargo, estos últimos días, la “queen Maxima”, como se la suele apodar, estuvo en el ojo de la tormenta de la prensa holandesa por la elección de los diseñadores que usa al vestir.
Josine Droogendijk, una bloguera especializada en los outfits diarios de Máxima, dijo que el 95% del presupuesto lo gasta en firmas de ropa y accesorios extranjeros, y no apuesta a diseñadores locales.
"Es indignante que la Reina Máxima gaste el 95% de su presupuesto de ropa en la frontera. Addy van den Krommenacker tuvo un nuevo comienzo el año pasado. ¿Por qué no le pide un vestido de noche?", reclama la joven.
Los medios de su país tomaron esta información como un “escándalo” por no apoyar la moda nacional. Lo cierto es que Máxima tiene algunas firmas de cabecera que la acompañan en cada encuentro oficial. Uno de ellos es Edouard Vermeulen, de la marca Natan, favorito de las mujeres de la realeza; y también, Fabienne Delvigne, la diseñadora belga responsable de la mayoría de los sombreros.
Sin embargo, no solo usa de diseñador, también apuesta a las grandes marcas y low cost, como Zara y H&M. Pero desde su país de residencia, insisten y le reclaman que no valora el diseño que hay ahí.
Natan, la firma elegida por Máxima Zorreguieta
Esta firma fue creada por el interiorista belga Edouard Vermoulen. Actualmente es una de las favoritas de la esposa de Guillermo y de muchas mujeres de la realeza, entre ellas Brigitte Macron, Letizia, Melania Trump y Silvia de Suecia.
A diferencia de otros diseñadores que visten a las Primeras Damas y prefieren evitar a la prensa, él es la antítesis. Brinda entrevistas a todos los medios contando sobre sus colecciones y la relación que tiene con cada una de ella y lo que les diseña, pero sin contar confidencias.
Edouard Vermoulen llegó a la moda por casualidad. Supo que era su pasión cuando un día fue a comprar ropa con su madre, su abuela y sus primos en París.
“A principios de los años 80 había al menos treinta modistos y compartí la maison con Paul Natan, una casa de costura que había sobrevivido a su propietario, que había fallecido en los años 50”, rememoraba sobre sus inicios en una entrevista con L’Echo, un periódico financiero belga.
“En esa época yo soñaba con tener mi propia marca. Mi nombre, Édouard tenía un pase, pero Vermeulen, imaginad tener que deletrear ese nombre a las clientas francófonas… Además, era muy joven y totalmente desconocido, mientras que Natan tenía una cierta notoriedad. Los vestidos favoritos de mi madre eran de Paul Natan y decía que sus amigas también lo conocían”, declaró al mismo medio.
Cómo se prueban la ropa las reinas
A la revista colombiana Paula, el diseñador contó cómo es el sistema de medidas y pruebas que se hacen las reinas de Europa cada vez que le solicitan un modelo. “A la reina de Holanda la conocía de cuando vivía en Bruselas y aún era Máxima Zorreguieta”.
Por ejemplo, sobre la argentina, dijo que ella va a su atelier en la avenida Louise de Brusels dos veces al año. Ahí no sólo puede ver de primera mano la colección que esté vigente, sino que también miembros de su equipo pueden ajustar cada una de las prendas a su silueta.
