Entre General López y Lisandro de la Torre, ya se observa el nuevo solado, el mobiliario urbano, la moderna iluminación led, la bicisenda, los cruces a nivel y el parquizado.
El proyecto tiene como objetivo reordenar los distintos modos de movilidad urbana en la zona, priorizando la seguridad peatonal y la circulación del transporte público. Asimismo, aliviará problemas históricos, como el de la intersección con calle Catamarca o el de la rotonda frente al club Unión, en el cruce con Bulevar Pellegrini.
El diseño integral del paseo contempla todas las premisas de accesibilidad como la eliminación de desniveles en el recorrido, vados en zonas de cruce peatonal y losetas hápticas podotáctiles para personas con dificultades visuales. Además, incluye la renovación e incorporación de mobiliario urbano (bancos, cestos, bolardos de protección, rampas peatonales, entre otras), y la incorporación de columnas de iluminación bajas en el cantero central. Los nuevos solados son de losetas graníticas de gran resistencia en los sectores de uso peatonal incluyendo un sendero podotáctil, y de pavimento articulado de adoquines de hormigón rectangulares en los sectores de cruces vehiculares. El sector destinado a bicisenda se construye con hormigón armado llaneado mecánicamente.
La propuesta retoma la idea del bulevar como espacio de paseo, y que fuera el origen de esta avenida, priorizando el uso de las áreas peatonales para la circulación, la recreación y el esparcimiento. Incluye los cruces de calles a nivel de veredas donde resulta técnicamente posible, dándole continuidad al plano de piso de circulación peatonal. En las bocacalles, el cruce de calle se hace a nivel de calzada.
“Es poner a consideración de los vecinos el resultado final de estas cinco cuadras, que contienen lugares para caminar, equipamiento urbano y un trabajo paisajístico realizado por especialistas con un sistema de riego, como el que utilizamos en la Plaza Pueyrredón. Además, incorpora una senda para ciclistas, que va a significar un nuevo punto de atracción para este tipo de movilidad sustentable, en este sector de la ciudad”, detalló Marcelo Pascualón, secretario de Planeamiento Urbano.
El funcionario recordó que intervención en el cantero central de Avenida Freyre, “no es solo una obra de arquitectura, sino que tiene un componente hídrico muy importante que viene acompañado de intervenciones como en la zona de Freyre y Catamarca, donde ya van tomando su configuración los retardadores pluviales; y el desagüe de Bulevar Zavalla y Tucumán que ya está concluído”. A la altura de Catamarca, se avanza en la construcción de los retardadores pluviales y en los conductos de conexión que cruzan Avenida Freyre de manera de vincularlos con los desagües existentes. “Entre Catamarca y La Rioja, quedarán a cielo abierto como un espacio paisajístico, con plantas y vegetación de agua; y entre la Rioja y Tucumán, estarán enterrados. Es una intervención que aliviará los anegamientos recurrentes”, explicó.