Con la negociación del frente de frentes como telón de fondo, la interna del PRO santafesino se recalienta en la previa de una reunión clave para el partido.
El viernes pasado, autoridades partidarias y legisladores que integran dos de los tres campamentos amarillos en Santa Fe se sacaron una foto en Rosario y llamaron a armar “una alternativa política que encare las soluciones a los problemas de nuestra provincia”.
“El mensaje que intentamos dar es que no hay una opinión única, y que lo que dice el presidente del partido no representa a todo el PRO”, dijo a La Capital la vicepresidenta de la fuerza, Gisela Scaglia.
Y agregó: “El vicepresidente segundo, Germán Pugnaloni, y el secretario del partido, Lucas Incicco, y yo estamos en la mesa de Juntos por el Cambio y tenemos miradas diferentes a las de Cristian (Cuhna), que planteó algunas definiciones que no fueron consultadas”.
La semana pasada, antes de una áspera reunión de la mesa provincial de Juntos por el Cambio, Cunha había dicho a este diario que antes de montar una nueva alianza querían definir con los eventuales socios “una columna vertebral programática”.
“No nos vamos a sentar si no hay algo en serio, concreto. No nos vamos a juntar para ganar una elección, queremos juntarnos para gobernar bien, independientemente de quién lo haga”, había dicho el dirigente, que pertenece al espacio liderado por el diputado nacional Federico Angelini.
El vicepresidente nacional del PRO, que reunió el sábado en la localidad de San Agustín a 400 dirigentes y militantes en lo que pareció el virtual lanzamiento de una candidatura a gobernador, se muestra más reticente al montaje de un nuevo frente opositor.
Por el contrario, los dirigentes que se reunieron el viernes en Rosario están decididos a avanzar por el camino de la unidad del no peronismo y cultivan vínculos fluidos con las tribus más fuertes del radicalismo santafesino.
Mientras Scaglia y el diputado nacional Gabriel Chumpitaz tienen una alianza con Maximiliano Pullaro -el único anotado públicamente en la carrera por la Gobernación- la concejala rosarina Anita Martínez y la diputada nacional Germana Figueroa Casas tienen un acuerdo con el sector que tiene como principal carta electoral a la senadora nacional Carolina Losada y al diputado provincial Julián Galdeano como armador en jefe en Santa Fe.
Sin eufemismos, hace unos días Chumpitaz -que se posiciona para ser el candidato a intendente de Rosario del sector de Pullaro- escribió en Twitter: “El frente de frentes es imprescindible para Santa Fe, quien niegue esta construcción política, será funcional al kirchnerismo, y por tanto deberá hacerse cargo del potencial fracaso que esto implicaría. El riesgo es muy alto si las mezquindades conducen el proceso político”.
Denominadores comunes
En este marco, dirigentes de todas las tribus del PRO se verán las caras el primero de octubre en la ciudad de Gálvez. Allí se reunirá el consejo directivo del partido, integrado por 21 dirigentes, y tendrá la cuestión electoral al tope de la agenda. Es una instancia, señala un dirigente que sigue de cerca el poroteo en la fuerza, se registra un “empate técnico”.
De todos modos, Scaglia se mostró confiada en que de la reunión en la localidad del departamento San Jerónimo saldrán con una posición de consenso para llevar a Juntos por el Cambio, que tendrá su tercera mesa provincial un día antes, en Rafaela.
“Hay que plantear los denominadores comunes. En Juntos por el Cambio eso está más claro, pero en el espacio más amplio también podemos encontrarlos; nadie va a tener objeciones sobre seguridad, educación, propiedad privada y un Estado más eficiente”, señaló la dirigente, que dijo que “sería un honor” ser candidata a vicegobernadora pero, señaló, será una decisión del partido y de la alianza.
En tanto, la ex diputada nacional se mostró dispuesta a conversar sobre el nombre del espacio -y que adopte una marca provincial, como en Mendoza o en Corrientes- pero, al igual que Cunha, cree que la dimensión provincial no puede estar divorciada de la nacional. “Nadie puede ser funcional al kirchnerismo”, advirtió.
Eso no significa que las diferencias se evaporen. Por caso, sobre cómo armar la oferta electoral.
Los sectores del PRO que salieron a jugar fuerte en la interna tejen listas cruzadas con la UCR. "Es lo que demanda la sociedad", aseguraron.
“Tenemos que hacer autocrítica, cuando fuimos con listas puras salimos terceros. La gente buscó listas que expresen la diversidad de Juntos por el Cambio y el año que viene va a hacer lo mismo”, deslizó un dirigente de la mesa chica del PRO.
Fuente: LaCapital
