Un nuevo informe del Observatorio Argentinos por la Educación volvió a encender las alarmas sobre la realidad educativa del país y, en particular, de Santa Fe. El Índice de Resultados Escolares (IRE) 2024, elaborado a partir de los datos de las pruebas Aprender y del relevamiento oficial de matrícula, muestra que solo 10 de cada 100 estudiantes argentinos que comenzaron primer grado en 2013 lograron finalizar la secundaria en el tiempo esperado y con los aprendizajes mínimos en Lengua y Matemática.
En el caso de Santa Fe, el 63% de los alumnos de la cohorte 2013-2024 llegó al último año de secundaria en edad teórica (sin repetir ni abandonar), pero apenas 18 de cada 100 alcanzaron niveles satisfactorios o avanzados en Matemática y 66 de cada 100 en Lengua. Esto significa que, al combinar ambas variables, una minoría logra concluir el ciclo obligatorio “en tiempo y forma”.
La comparación con la medición previa, correspondiente a la cohorte 2011-2022, evidencia un retroceso. En dos años, la caída del rendimiento en Matemática —que se repite en casi todas las provincias— impactó de lleno en el indicador final. A nivel nacional, la proporción de estudiantes que llegan al final del secundario en tiempo y forma pasó del 13% al 10%, y Santa Fe no fue la excepción.
Otro dato que aporta contexto es el perfil socioeconómico de la matrícula santafesina: el 37,2% de los alumnos pertenece a los quintiles más bajos (1 y 2), lo que ubica a la provincia apenas por debajo del promedio nacional (39,8%). El informe advierte que el nivel socioeconómico tiene una relación directa con el desempeño escolar y explica buena parte de las desigualdades entre jurisdicciones.
Los especialistas remarcan que, más allá de los avances en cobertura, el desafío central está en la calidad de los aprendizajes. La mejora en Lengua contrasta con el deterioro en Matemática, lo que pone en evidencia la necesidad de políticas sostenidas de acompañamiento en secundaria para garantizar trayectorias completas y con conocimientos sólidos.

