Unión sabía que debía ejecutar un partido perfecto, bajarle el goleo a Boca, no permitirle correr y en el poste bajo intentar al máximo obstaculizar el trabajo de Hernández. Pero Nesbitt fue quien sacó réditos en el primer cuarto (8). Claro que el Tate fue certero a distancia (Jaime, Schoppler, Cylla) y dejó 19-18 abajo los 10′ iniciales.
En el segundo empezar a llegar las rotaciones (Ponce a diferencia de duelos anterior, mantuvo 8′ su quinteto inicial). Vildoza tomó las riendas y el ingreso de Boccia (7) jugando muy bien en el poste bajo, le dio resultado al elenco de García. El Xeneize sacó siete pero nuevamente el chaqueño Schoppler (9) acortó el margen para el 33 a 32.
Lo mejor de Boca se vio en los 3′ iniciales del tercero, con defensa impecable, corridas y préstamo solidario del balón. La diferencia se extendió a 10, aunque jamás Unión, con sus armas, dejó de pelear. Le costó mucho anotar a distancia (erró 11 triples seguidos) y Bertona fue poco para un 51-42 que parecía encaminar la victoria.
Pero nada de eso sucedió hasta los instantes finales. Boca perdió peso interior, Hernández se fue por faltas, Schattmann siguió con baja eficacia y Vildoza lo sostenía. Aún en sus carencias, empezaron a llegar las bombas (Bertona, Jaime), el rendidor Meinero dio batalla en la pintura y llegaron palo y palo al minuto final.
Allí, los de García fueron precisos desde la línea y se quedaron con la séptima victoria frente a un adversario que dejó todo para luchar ante un candidato a pelear por todo esta temporada.
Fuente: Marca Personal.
