El impacto de las medidas tomadas para navegar la pandemia en el empleo registrado fue inevitable. Se estima que alrededor de 4 millones de puestos de trabajo se perdieron en los últimos meses.
El Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC) reveló que solo entre el primer y el segundo trimestre del año se dieron de baja unos 3,7 millones de empleos registrados. El impacto habría sido aún mayor en el segmento informal.
La Unión Industrial Argentina (UIA) informó que la creación de nuevo empleo en la Argentina acumula 23 meses a la baja y en el sector industrial lleva más de 54 meses con retrocesos interanuales.
Por último, el Sistema Integrado Previsional Argentino (SIPA) muestra que en marzo, en el inicio del aislamiento, el empleo registrado en el sector privado cayó 0,7% respecto del mes anterior. El pico fue en abril, cuando retrocedió 1,7%. En mayo la baja fue del 0,4% intermensual y en junio y julio 0,2% y 0,1% respectivamente. Para agosto, la Encuesta de Indicadores Laborales (EIL) ya indica otro retroceso del 0,1%, que es el último dato oficial disponible.
Hacia el futuro el panorama mejora pero no lo suficiente. De acuerdo al último informe de la consultora Hucap, dado a conocer en octubre, el 61% de las organizaciones en argentina planea mantener su dotación de personal y un 3% incluso busca incrementarla.
Miguel Alfonso Terlizzi, presidente de Hucap, dijo que ese reducido grupo que incorporará talento en plena pandemia es del sector tecnológico, de desarrollo de software y servicios informáticos, "que de manera incesante y con una gran demanda que no se está pudiendo le cubrir", además de empresas de la industria química y de logística.
"Dentro de las empresas que indican que las búsquedas siempre se mantuvieron activas, también se encuentran a la cabeza las empresas de tecnologías, bancos, alimentación, agropecuarias, financieras, salud, telecomunicaciones, químicas, transporte y logística, materiales de construcción", afirmó Terlizzi, a la vez que destacó que en todas las empresas, incluso en las que tuvieron dificultades para operar en pandemia, "las posiciones de sistemas y de e-commerce encabezan ampliamente los requerimientos de búsquedas."
Pero un preocupante 36% de las firmas consultadas por la empresa de talento dijeron que han recortado su nómina de personal o planean hacerlo. Un 82% de ellas admitió que la decisión tiene que ver con el impacto en sus negocios del COVID-19.
"Otro dato importante que surge del relevamiento es que del 61% de las organizaciones que indican que planean mantener su dotación, más de un 45% nos han indicado que dicha decisión se encuentra supeditada a cómo continúe el aislamiento, facturación y rentabilidad que permita hacer frente principalmente al pago de sueldos, también considerando que está vigente actualmente la prohibición de despedir sumado a la doble indemnización", remarcaron desde Hucap. Y aseguran que la asistencia estatal para pagar sueldos es la que, sin resolver los problemas de fondo, permitió que estas cifras no fueran peores.
Además de los despidos otra consecuencia evidente de la pandemia fue el "hirig freeze". A siete meses del inicio del aislamiento, el 41,7% de las empresas sigue con las contrataciones congeladas, y un 33,3% afirmó que a medida que pudo retomar las operaciones reinició algunas búsquedas de las posiciones clave para el negocio. Solo un 25% afirmó que nunca paró de incorporar el talento necesario.
Para el año próximo, más de la mitad de las firmas relevadas por Hucap (53%) no tiene una proyección de cómo seguirá su dotación de personal. Un 32% apunta a mantenerla y un 3% a incrementarla, pero hay otro 12% que también estima reducciones para el 2021.
Casi seis de cada 10 empresas consultadas por Hucap en septiembre (59,2%) tienen definido el porcentaje de incremento salarial que los empleados no convencionados recibirán este año.
En promedio, los sueldos de esos colaboradores se incrementarían un 36,6% en todo 2020.
Esto está ligeramente en línea con lo que el mercado espera respecto de la inflación anual. El último Relevamiento de Expectativas de Mercado (REM) que el Banco Central realiza en base a proyecciones de 40 consultoras y firmas financieras privadas arrojó que la inflación de septiembre ascendió al 3% y que los analistas esperan que a fin de año se ubique en torno al 36,9% interanual.
Un 15,6% de la suba de salarios en las organizaciones consultadas se brindó en el primer semestre del año y un 21% se brindó o se brindará en este segundo semestre, indicó la mencionada consultora de talento.
Del reporte también se extrae que el 40,8% de las 93 empresas participantes dijo que aún no tiene definida la pauta salarial anual para el 2020 para el personal fuera de convenio. Las preguntas fueron realizadas entre el 11 y el 30 de septiembre.
En un país que hace años que vive con inflación de dos dígitos no es inusual que las empresas realicen retoques a sus previsiones salariales hasta los últimos meses del año. Pero incluso para la Argentina que cuatro de cada 10 firmas no cuenten con un presupuesto para el tercer trimestre del año es inusual, consideró Terlizzi, quien aseguró que es necesario remontarse al 2001 para encontrar valores similares a esa altura del año.
"Si bien es cierto que en los últimos años, con las cláusulas gatillo o de revisión que los gremios establecían para el personal dentro de convenio, comenzaba a ‘estirarse’ el período de negociación e incrementos salariales, la realidad es que las empresas tenían en su ’radar’ el estimado de incrementos que iban a brindar, lo tenían contemplado en el presupuesto, más allá de alguna pequeña variación que pudieran tener para evitar que no sea el personal no convencionado nuevamente la variable de ajuste y mayores problemas de solapamiento a los que muchas organizaciones ya se enfrentan", añadió el titular de Hucap
Para Terlizzi, "hoy el panorama en este porcentaje de empresas mencionado es de incertidumbre sobre si van a poder brindar o no el incremento definido y qué porcentaje finalmente van a otorgar."
Fuente: iProfesional