Unión de Santa Fe y Godoy Cruz entretuvieron con un partido intenso a los más de 27 mil hinchas del Tatengue que coparon las tribunas del Estadio 15 de abril, aunque el 0-0 final dé la imagen de un partido más bien discreto.
El local, con un Kily González movedizo al borde del campo de juego, necesitaba una victoria para escaparle al descenso, más aún después de la derrota de Gimnasia y Esgrima de La Plata frente a Huracán el martes. Del otro lado, el Tomba también buscaba escalar en la tabla anual, aunque en su caso para acercarse a la Libertadores. Todo terminó en un empate que no convence a ninguno de los dos.
Arrancó mejor Unión, ahogando con la presión en la mitad de la cancha a un Godoy Cruz que no entró a jugar este partido con la misma energía. Fue vertical en sus ataques, sin entretener la pelota en el mediocampo e inquietando al conjunto mendocino con la amplitud de sus laterales-volantes, pero sin llegar a generar jugadas de claro peligro.
Fue tal la intensidad del Tate en esos primeros minutos que pudo haberse quedado con diez: después de ser amonestado, un Claudio Corvalán pasado de revoluciones cometió una infracción que pudo haber sido sancionada con una nueva tarjeta amarilla. Yael Falcón Pérez lo perdonó.
Después, los dirigidos por Daniel Oldrá se acomodaron en el partido y equilibraron el juego.Tadeo Allende, buen complemento para Salomón Rodríguez en ataque, tuvo la jugada más clara del partido a los 38 minutos de esa primera mitad: recibió un pase largo de Roberto Fernández, escapó de la marca de Corvalán y su remate dio en el palo.
El complemento siguió la misma tónica. Unión arrancó decidido a llevarse por delante a Godoy Cruz y lo logró, pero una deficiente definición de Tiago Banega, primero, y una magistral atajada del Ruso Rodríguez, después, lo privaron de abrir el marcador.
Fue un segundo tiempo más abierto, con el mediocampo como una simple zona de tránsito. Ambos tuvieron sus chances, pero no lograron concretar y se fueron en cero.
Fuente: Clarin