Por Juan Trento
Un caso completamente estremecedor conmociona a todo el norte santafesino. Este viernes fue imputado por violar y golpear a los 10 hijos que tienen actualmente entre 4 y 20 años que tuvo con dos mujeres con las que convivió y que a su vez son primas entre ellas.
Fiscal Aldo Gerosa
El fiscal del Ministerio Público de la Acusación Aldo Gerosa fue el responsable de llevar adelante una investigación compleja en que salió a luz un entramado de violencia intrafamiliar en los que un hombre aprehendido el último miércoles e identificado como M. A. C. de 38 años, fue imputado de someter a sus 10 hijos -los que actualmente tienen entre 20 y 4 años- a un trato bestial e inhumano, a partir del año 2008, y conforme a constataciones que fueron hechas después de la denuncia hecha por funcionarios del área Social de la Municipalidad de la ciudad de Avellaneda en el departamento General Obligado.
Ciudad de Avellaneda
Los hechos narrados ocurrieron en una vivienda ubicada en la zona suburbana o rural de la ciudad de Avellaneda y a partir del año 2008, M. A. C. de 38 años, fue el responsable de golpear con cintos, correas y cables y otros objetos contundentes a sus hijos -eran cuatro en ese entonces, dos mujeres y dos varones- con la finalidad de lograr que estos se disciplinen, llegando a quemarlos con objetos incandescentes en distintas partes del cuerpo.
Esto fue corroborado por un equipo interdisciplinario de psicólogas, docentes y asistentes sociales, que establecieron en el informe que los chicos víctimas de la situación, tenían una profunda afectación psicológica con traumas severos que afectaron su personalidad y dañando sus capacidades cognitivas, causando miedo, sometimiento, dependencia, conductas anormales, deseos de no vivir en su casa familiar, problemas de sueño y consiguientes problemas de aprendizaje.
Menores dormían con perros
Otro informe señala que desde el año 2008, M. A. C. de 38 años, privó reiteradamente auxilio y cuidados que son imprescindibles para todos sus hijos, impidiendo además que otros los ayudaran, evitando que ambas madres protegieran a sus hijos, evitando también que los menores fueran ayudados por los docentes de los establecimientos educacionales a los que asistían o de Asistencia Social de la Municipalidad de Avellaneda, siendo que los chicos por su edad no podían valerse por sí mismos y eran obligados a vivir hacinados y entre la basura, en lugares inhabitable para la supervivencia humana, y junto a perros sarnosos y con parásitos externos.
Chicos sin alimentos
Este segundo informe amplía que los privaba de la necesaria alimentación y solo les daba lo que sobraba después que él comía, llegando a impedir que fueran a la escuela para que pudieran alimentarse con la ración del comedor escolar, y evitando en todo momento que sus madres los llevaran para asistencia médica y psicológica, evitando la asistencia de medicamentos como de tratamientos ordenados por los profesionales para el tratamiento de distintas patologías.
Como corolario de lo expresado, M. A. C. de 38 años, obligaba a los menores a mendigar en la vía pública, exponiéndose a fríos intensos, además de obligarlos a ir a la escuela desabrigados en invierno, con el pelo mojado después de bañarlos con agua fría, y llegando a obligarlos a dormir junto con los perros de la vivienda en un pozo en el exterior del inmueble.
Chicos desprotegidos
Uno de los médicos que atendió a varios de esos hermanitos del mismo grupo familiar detectó en los chicos asistidos ".....bajo peso, infecciones en forma repetida, hambre y sed, piel seca y descamándose, cabello quebradizo, diarreas y fiebres frecuentes, parásitos intestinales, pediculosis, afección en las área cognitivas y socioafectivas, bajo rendimiento escolar, alteración en el desarrollo del lenguaje, en el desarrollo motor y emocional, condiciones de vida paupérrimas y deficiencias sanitarias básicas". Otro informe pluridisciplinar con profesionales de distintas áreas coincidieron en afirmar que algunos de los hijos narraron ser sometidos a violaciones sexuales con descripción de prácticas aberrantes, llegando a atar a una de sus hijas a una de las patas de una mesa y luego abusar de ella, conforme a la narración de sus hermanos mayores.
Hematomas
Otro de los hechos ventilados ante los profesionales que asistieron a los chicos, da cuenta que a una de sus hijas la sometió a una violenta paliza con aplicación de trompadas, patadas, la arrastró del pelo, la tiró en una cuneta y le rompió la ropa, y cuando la menor llegó a la escuela al otro día, exhibió las marcas en el cuerpo que le dejó la golpiza. Otra de las menores fue golpeada al ser arrojada contra una puerta, y que posteriormente también fue corroborado en el establecimiento escolar al que concurría.
Abuso sexual
Los hechos narrados por los hijos de M. A. C. de 38 años, nenas y nenes de distintas edades, sometidos en numerosas oportunidades a prácticas sexuales aberrantes (violaciones) y constatadas por profesionales médicos, son de una gravedad y maldad única, y por ese motivo serán omitidos sus detalles.
Imputativa con prisión preventiva
El seguimiento del fiscal del Ministerio Público de la Acusación, Aldo Gerosa, junto a los pesquisas policiales de Trata de Personas y Violencia de Género de la Agencia de Investigación Criminal AIC, terminó el miércoles con la aprehensión del principal investigado, previo a que todos y cada uno de sus 10 hijos -mujeres y varones- fueron rescatados y son asistidos por los organismos del Estado del área Social como de asistencia médica y psicológica. Respecto del aprehendido, fue llevado a la audiencia imputativa el viernes, y por la gravedad de los sucesos, se dictó la prisión preventiva como presunto autor de los aberrantes delitos descriptos.
