El primer femicidio del año 2021 tuvo lugar en la provincia de Salta, donde en los últimos minutos del jueves 31 de diciembre un hombre ataco a su expareja con un cuchillo y luego intento quitarse la vida. La mujer, madre de cuatro hijos, murió en las primeras horas del año nuevo, en tanto que su asesino está internado con pronóstico reservado.
El hecho sucedió en la zona norte de la capital salteña, más conocido como el Barrio Universitario. Mario Balverdi, de 47 años, esperaba escondido a su expareja, Graciela Flores, de 44 años, y, según trascendió desde la oficina de la fiscal penal 1° de la Unidad de Graves Atentados contra las Personas de esta provincia, Ana Inés Salinas Odorisio, cuando ya la tenía a poca distancia la intercepto y le aplico una puñalada en el pecho, ocasionándole graves heridas.
Con Flores ya en el piso, su agresor -que la creyó muerta- intentó quitarse la vida, pero sin éxito, dado que ambos fueron trasladados, en código rojo, al Hospital San Bernardo. Durante las primeras horas de este viernes, la mujer murió y se dio a conocer que su agresor se encuentra con pronóstico reservado por quemaduras aéreas.
La Fiscal Salinas Odorisio ordeno distintas medidas de rigor, entre ellas la autopsia del cuerpo de Graciela Flores, como así también la custodia en la puerta de la terapia intensiva donde el femicida se debate entre la vida y la muerte. El caso causó indignación en la sociedad salteña, principalmente en grupos feministas, quienes se manifestaron bajo la consigna: "El machismo sigue matándonos".
Desde el Espacio de Género y Diversidad de ATE Salta, la Fundación GeMa (Género y Masculinidades), Red Docentes por el Derecho a Decidir, Fundación Entre Mujeres, Kolina Feminista, la Campaña por la Emergencia Nacional en Violencia contra las Mujeres Salta, Géneros y Disidencias de Nuevo Encuentro, Mujeres Trans Argentina, seccional Salta y Mala Junta Salta, se expresaron ante la muerte de Flores.
"Las organizaciones feministas sentimos bronca mezclada con dolor ante la noticia del primer femicidio en Salta. También sabemos de la cotidianidad de compañeras que como ella salen día a día, y llegan a sus guardias como sea, porque cobran sueldos míseros", manifestaron en una declaración publicada en la red social Facebook.
En el mismo escrito hicieron saber la preocupación que tiene la familia de la víctima, porque "no contaba con un seguro de sepelio, ni un seguro de vida". Además, recordaron a Graciela Flores como una persona muy responsable con su trabajo, pero denunciaron que el Gobierno "no lo reconocía". Y concluyeron: "Que no se nos vuelva paisaje el femicidio de nuestras mujeres y que no se nos vuelva costumbre la precarización".
Fuente: La Nación