En la última medición de Prefectura Naval Argentina, el río Paraná llegó a los -0,19 metros en el Puerto de Santa Fe; se trata del nivel más bajo registrado desde 1949 cuando alcanzó los -0,20 metros. El Instituto Nacional del Agua publicó un nuevo pronóstico ratificando la continuidad del fenómeno sin expectativas de recuperación: "Prevalece una tendencia descendente en todas las secciones del río Paraná en territorio argentino. Continuará predominando en los próximos tres meses. Va definiéndose la tendencia prevista, con afectación a todos los usos del recurso hídrico, exigiendo especialmente a la captación de agua fluvial para consumo urbano.
Juan Borus, especialista del INA, indicó a Veo Noticias que "no tenemos un cambio significativo de acá a casi el 31 de diciembre, el panorama es negativo, no es bueno, no es favorable. Continuaríamos con esta situación de bajante extrema todo este tiempo con un pronóstico reservado para el comienzo del año que viene que podría continuar la bajante sin mayores variaciones".
Y agregó que "responde a un ciclo seco regional que es muy persistente y no tiene visos de terminar y además, porque nos pone un montón de desafíos ante este cambio que ha habido, esta mayor dependencia que Argentina tiene del río Paraná hace que estemos ante impactos mucho más severos, somos mucho más vulnerables a lo que le pasa al río Paraná, con lo cual uno de los aspectos que hay que considerar es la oportunidad que tenemos de ser más cuidadosos con el recurso hídrico".
