Tras un invierno complicado para el sector, los empresarios cabañeros de la costa local tienen todas sus expectativas puestas en esta temporada estival que arrancó lenta, pero con buen ritmo.
El balance de las fiestas de Navidad y Año Nuevo fue positivo para el turismo en el corredor de la Ruta Provincial Nº 1, que alcanzó una ocupación de más del 90%; aunque se completó a último momento. Pero en la primera semana de enero los complejos quedaron casi vacíos, a la espera de los huéspedes que poco a poco van arribando para disfrutar el primer fin de semana.
Los dueños de complejos habitacionales de la zona coinciden en que las reservas ya no se realizan con anticipación, como sí ocurría años anteriores. Asimismo, al igual que el año pasado, la demanda de cabañas se concentra durante los fines de semana, durante períodos cortos, siendo de lunes a jueves muy baja.
Los precios por día para cuatro personas oscilan entre los 2.000 a 5.000 pesos, dependiendo de la ubicación y servicios que se ofrecen en los diferentes complejos del corredor costero.
El empresario Rubén Zurbrigen aseguró que para las fiestas la ocupación fue muy buena en las cabañas y quintas de la zona de la costa santafesina. No obstante, para estas primeras semanas del año las reservas previas son "relativamente" buenas, ya que comparado con otros años a esta altura, ya había mayores reservas. También afirmó que la gente se vuelca a vacaciones cortas y que influye mucho el factor climático. Además, indicó que los precios varían dependiendo de las características de la cabaña y los servicios que de brinden.
