La renovada intención del Gobierno de poner en debate la baja de la edad de imputabilidad de los menores, para llevarla de los 16 a los 15 años, arrancará en el Congreso con pronóstico incierto.
Hace más de veinte años que el asunto es materia de discusión y vuelve en forma recurrente como bandera para combatir el delito, siempre sin éxito.
Esta vez ni siquiera hay crimen de impacto social, como pasó en años anteriores, que genere un clima de opinión proclive a este cambio. Y justo en un año electoral en el que todos presagian que el Congreso funcionará de manera restringida, y que sólo pasarán proyectos que reúnan mucho consenso con la oposición.
Por lo pronto, el Gobierno confirmó a través de la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, que enviará la iniciativa para las sesiones extraordinarias de febrero.
Pero la propuesta encontrará resistencia en la Cámara de diputados, donde referentes del kirchnerismo, el peronismo federal, el massismo, RedxArgentina, el Movimiento Evita y la izquierda, o se pronunciaron en contra o cuestionaron que se trata de “marketing” de campaña y una “cortina de humo” frente a los problemas de la economía.
En el Senado, el clima no se ve tan hostil para el oficialismo, aunque su principal interlocutor en el PJ, Miguel Pichetto, tampoco se mostró convencido.
“Hay delitos que cometen menores, pero no es el problema que hoy está viviendo la Argentina en materia de seguridad”, tomó distancia el rionegrino, consultado por Clarín. Para Pichetto “la baja de edad es un debate estéril, siempre tiene aristas de cuestionamientos”, y dijo que se debía trabajar sobre la base del proyecto de Régimen Penal Juvenil que aprobó el Senado en 2009.
Fue con el aval de la entonces presidenta Cristina Kirchner y la iniciativa bajaba la imputabilidad de los menores a los 14 años. Nunca se trató en la Cámara baja.
De Diputados volvieron a llegar expresiones que generan dudas sobre la posibilidad de que Cambiemos sume los votos necesarios para alcanzar mayoría.
El salteño Pablo Kosiner, jefe de la bancada de Argentina Federal consideró “difícil” tratar este año el proyecto: “Lo penal tienta a muchos a un discurso de impacto electoral”, advirtió.
Fuente: Clarin.com