En tres días, la agroindustria liquidó US$ 785 millones a través del llamado "Dólar-Soja", y quedó cerca de completar los US$ 1.000 millones iniciales prometidos al ministro de Economía, Sergio Massa.
En el mes, aceiteros y cerealeras se comprometieron a liquidar unos US$ 5.000 millones.
El Banco Central sumó más de US$ 300 milllones en el mercado y acumula casi US$ 440 millones en septiembre.
Por operaciones con el dólar soja, se registraron ventas por US$ 464 millones.
El secretario de Agricultura, Juan José Bahillo, dijo que "el dólar soja superó las expectativas que teníamos". Durante el recorrido por una planta de semillas de Pergamino, Bahillo destacó: "El campo nos acompaña con ventas récord y el dólar soja superó nuestras expectativas. A este ritmo, esperamos superar los 5.000 millones de dólares previstos" para este mes.
Con respecto al sector semillero, el secretario de Agricultura destacó: "La Argentina está a la vanguardia del desarrollo tecnológico agrícola internacional. La capacidad de innovación de la industria de las semillas y la vocación emprendedora de nuestros productores son características que nos destacan ante el mundo".
Según las proyecciones de la Asociación de Semilleros (ASA), se estima producir semillas para la siembra de más de 497,300 hectáreas para la campaña 2023-2024, según el siguiente detalle: 57,600 de maíz, 10,500 de sorgo, 11,200 de girasol, 297,000 de soja y 121,000 de trigo.
El director ejecutivo de la Asociación de Semilleros, Alfredo Paseyro, resaltó: "Aportamos innovación, trabajo y sustentabilidad al campo argentino, nuestra industria semillera es federal. Agrupamos a más de 80 empresas y empleamos a más de 115.000 trabajadores de manera directa o indirecta. Nuestro objetivo es asegurar el derecho de propiedad intelectual de las variedades vegetales y promover el uso de tecnología en semillas que brinden una seguridad alimentaria".
Vitivinicultura
En tanto, los directivos de la Corporación Vitivinícola Argentina (COVIAR) se reunieron con Bahillo para acercarle algunas temáticas que afectan a la industria vitivinícola y comenzar a trabajar conjuntamente en una agenda estratégica que beneficie a lo que hoy es una actividad presente en 18 provincias del país.
Entre los temas planteados, desde COVIAR se propuso la posibilidad de impulsar un proyecto de ley para abordar la problemática de la lobesia botrana (una plaga que ataca principalmente el cultivo de vid). “Se trata de una plaga que hace mucho daño y lo que pedimos es una estrategia con un esquema fuerte para combatirla”, subrayó José Zuccardi, presidente de COVIAR.
Además, tras las medidas anunciadas por Massa, la reunión también tuvo como objetivo continuar con el diálogo en torno a la problemática relacionada a la pérdida de competitividad por efecto del atraso cambiario y se insistió en la necesidad de trabajar sobre la agenda de negociaciones internacionales para facilitar las exportaciones de toda la cadena vitivinícola.
“El desfasaje del tipo de cambio se nota en los números del sector. Los vinos argentinos tienen muy buena imagen en el exterior y son un producto exportable con mucho valor agregado. Por eso pensamos que debe haber un mecanismo para desgravar ese valor porque básicamente lo que tenemos en contra es la inflación”, afirmó Zuccardi.
Por su parte, Bahillo consideró “fundamental que sigamos pensando conjuntamente estrategias que permitan mejorar la productividad y competitividad de esta actividad que genera empleo y que es fuente de arraigo en muchas provincias del país”.
Fuente: NA