En Vivo

Etiquetas

Industriales alertan que la importación de maquinaria agrícola, puede ser un riesgo para el sector

Sostienen que Santa Fe es la principal productora de máquinas dedicada al agro con más de 200 establecimientos y genera 5 mil puestos de trabajo directos.

23 de enero de 2025


La Federación Industrial de Santa Fe emitió un comunicado en el cual manifiesta su preocupación ante la posible eliminación del Certificado de Importación de Bienes Usados (CIBU) para maquinaria agrícola, una medida que podría tener impactos económicos, productivos y ambientales negativos para el país.

"Nuestra provincia lidera la producción nacional de maquinaria agrícola, con más de 200 establecimientos dedicados a la fabricación de máquinas agropecuarias, que generan 5.000 empleos directos, y un cluster de gran desarrollo en el triángulo de Las Parejas, Armstrong y Las Rosas. 

Este sector dinamiza una amplia cadena de valor que incluye talleres metalmecánicos, proveedores de chapa y pintura, y empresas de tecnología de precisión. En 2023, la industria argentina fabricó más de 600 cosechadoras, 6.000 tractores y 550 pulverizadoras, tanto para el mercado interno como para el resto del mundo. Permitir la importación de maquinaria usada introduciría una competencia desleal: mientras estos equipos enfrentan un 26,5% en gravámenes, los insumos necesarios para fabricar maquinaria nueva soportan un 47%. Esto no solo perjudicaría a los fabricantes, sino que impactaría toda la cadena productiva, desarticulando esquemas como la toma de usados en la compra de maquinaria nueva y frenando la renovación tecnológica de un parque agrícola donde el 70% de las cosechadoras y el 80% de los tractores superan los 10 años de antigüedad.

Además de los riesgos económicos, la maquinaria usada puede introducir riesgos ambientales, a partir de la propagación de plagas que afectan la producción agrícola, como ya ha ocurrido en oportunidades anteriores. Problemas fitosanitarios han llegado a causar pérdidas de más de 11 millones de toneladas que se tradujeron en exportaciones pérdidas que superan los 1.600 millones de dólares.

Desde FISFE, por lo dicho, acompañamos el pedido de las entidades sectoriales CAFMA y AFAT, y solicitamos una revisión exhaustiva del análisis que sustenta la posible eliminación del CIBU, evaluando detenidamente sus efectos económicos, productivos y ambientales para la industria local y el sector agroindustrial. Promover la sinergia entre el campo y la industria es esencial para el desarrollo de la economía provincial y nacional".