En la primera ronda de la convocatoria al diálogo iniciada por el Gobierno, el presidente Mauricio Macri recibió este miércoles un primer respaldo de dos gobernadores del PJ y del precandidato presidencial peronista Daniel Scioli para debatir sobre 10 puntos básicos de gobernabilidad en la Argentina, aunque los referentes de la oposición también plantearon que la agenda propuesta por la Casa Rosada es "insuficiente" y deberá ampliarse a otros temas de discusión.
El ministro del Interior Rogelio Frigerio ofició de interlocutor de la Casa Rosada y en líneas generales hubo respaldo de los gobernadores Domingo Peppo (Chaco) y Gustavo Bordet (Entre Ríos) al igual que Scioli, quienes coincidieron en que, ante el contexto económico delicado en que se encuentra la Argentina, se hace necesario un diálogo para puntos de coincidencia en la dirigencia de la Argentina que brinden confianza hacia los inversores externos.
Sin embargo, el Gobierno no se llevó elogios contundentes del PJ en su propuesta de diálogo y hubo un claro reclamo por ampliar la agenda. Así quedó demostrado en las charlas que tanto Scioli como Bordet y Peppo mantuvieron en el despacho de Frigerio y que luego se tradujeron públicamente.
En este sentido, Scioli destacó que el diálogo con Frigerio fue "con ánimo constructivo, sin mezquindades y para poner el hombro al país". Pero el precandidato presidencial del PJ fue tajante como pocas veces: "Creo que la mejor forma de ayudar es influir a que las cosas cambien", dijo. Así lo dejó plasmado Scioli en una carta que entregó para el Presidente donde destacó que "es necesario que la política económica de la Argentina sea definida por los argentinos y no por los organismos de crédito multilaterales".
