Analistas y consultoras económicas privadas que estiman variaciones de precios están previendo que marzo cerrará con una inflación que nuevamente se acercará al 4%.
En el Gobierno apuntan directamente a abril como el mes bisagra para el inicio del descenso de la inflación tras varios meses de recalentamiento, pero estiman que este mes el indicador estará por debajo del 4%.
El Índice de precios al consumidor (IPC) representativo del total de hogares del país había registrado en febrero una variación de 3,6% con relación al mes anterior; en enero y diciembre había sido del 4%; en noviembre, 3,2% y en octubre, 3,8%.
El Relevamiento de Expectativas de Mercado (REM) realizado por el Banco Central entre los días 24 y 26 de febrero arrojó que las consultoras y los bancos esperaban una suba de precios del 3,7% para marzo, aunque esto se informó antes de la suba de los combustibles líquidos del 7% promedio que definió el Gobierno.
Las previsiones del REM son un promedio entre pronósticos de 43 participantes, entre quienes se cuentan 27 consultoras y centros de investigación locales, 13 entidades financieras de Argentina y tres analistas extranjeros.
Para Gabriel Bornoroni, presidente de la Confederación de Entidades del Comercio de Hidrocarburos y Afines de la República Argentina (CECHA), la suba de los combustibles en marzo no debería tener un gran impacto.
Un estudio realizado por economistas expertos en inflación a pedido de la CECHA indica que por cada 10 puntos porcentuales de suba de los precios de los combustibles líquidos hay un impacto de 0,04% en el valor de la Canasta Básica Total (CBT) que consumen las familias argentinas.
Un análisis que está desarrollando la consultora Ecolatina indica que solo en la primera quincena de marzo la suba de precios al menos en el área metropolitana fue del 3,3%, respecto del mismo período de febrero.
Christian Buteler, analista financiero, evaluó que si el Índice de Precios Mayoristas escaló 6,1% en febrero y los combustibles saltaron 7% en promedio en marzo, que suele ser un mes de alta inflación, este mes la variación promedio y generalizada de precios al consumidor podría ubicarse nuevamente en el 4%.
Los expertos del Instituto Estadístico de los Trabajadores (IET) señalaron que de cara a los próximos meses, "la dinámica de la inflación se asociará estrechamente a la dinámica del precio del dólar", dado que entre fines de febrero y la primera quincena de marzo empezó a morigerar el ritmo de devaluación diario del peso.
No obstante, también jugarán un rol protagónico los precios internacionales de los commodities; las tarifas de servicios públicos (congeladas desde hace ya más de un año) y las expectativas (que procuran ser coordinadas por medio del Consejo Económico y Social), sin grandes efectos por l momento.
El IET hizo una proyección que se muestra preocupante: si la inflación del resto de 2021 fuera del 3,5% mensual (equivalente a la del último semestre), la inflación acumulada en 2021 alcanzaría el 52,1%.
Si la inflación mensual pasara a ser del 3% en los próximos meses, la inflación acumulada sería del 44,9% y para que baje del 40% interanual, la inflación de los próximos meses debería ser inferior al 2,6% mensual, en tanto, para que sea inferior al 30%, la inflación mensual de aquí en más debería menor al 1,9%.
El informe de avance de inflación en alimentos y bebidas, que elabora semanalmente la consultora LCG, destaca que en la segunda semana de marzo, que finaliza hoy, la "suba de precios de los alimentos promedió 0,91%, desacelerándose 0,09 puntos porcentuales respecto a la semana anterior".
Así, el índice acumuló una inflación mensual promedio de 3,4% en las últimas cuatro semanas y llega a 3,6%, en la medición punta a punta; hace dos semanas el promedio mensual estaba en 3,2%, por lo que se observa un avance de la inflación en alimentos y bebidas.
"Estos niveles de precios dejan un arrastre de 3% para el resto de marzo", dijo la consultora, por lo que el alza mensual general podría estar en torno al 4% o incluso un poco por arriba.
Fuente: NA