El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, destituyó este martes a los tres jefes de las Fuerzas Armadas, quienes se negaron a continuar en sus cargos actuando políticamente a favor del Poder Ejecutivo contra las cuarentenas que gobernadores e intendentes decretaron para enfrentar el colapso hospitalario provocado por la pandemia de coronavirus.
La salida de los jefes del Ejército, Armada y Fuerza Aérea ocurre un día después de que fuera despedido el general Fernando Azevedo del Ministerio de Defensa, en el marco de una amplia reforma ministerial, con el cambio de 6 ministros, con concesiones a sus aliados en el Congreso.
La crisis militar y de gobierno ocurre un día antes del aniversario 57 del golpe de Estado de 1964, que instaló una dictadura hasta 1985 y es reivindicada por Bolsonaro y por los militares que ocupan el primer escalón del gobierno.
El motivo es la intención de Bolsonaro de utilizar a las FFAA como parte de su accionar contra las cuarentenas y toque de queda de los estados. "Yo no cierro nada, la vida vale tanto como los empleos, yo no soy el responsable de cerrar las ciudades", dijo hoy Bolsonaro a seguidores en el Palacio de la Alvorada.
El nuevo ministro de Defensa, general Walter Braga Netto, informó la decisión de reemplazar al jefe del Ejército, Edson Pujol, al de la Marina, Ilques Barbosa, y al de la Fuerza Aérea, Antonio Bermúdez.
Azevedo dijo que salió del cargo manteniendo a las FFAA como "fuerzas de Estado"; una forma de decir que rechazó el alineamiento político con el jefe del Estado.
Es la primera vez desde el fin de la dictadura que todos los comandantes militares son sustituidos en una misma decisión. No se informó aún quienes serán designados en las tres fuerzas.
Fuente: Télam