En los últimos días tuvo lugar la tradicional colecta anual de Cáritas. Del mismo modo, desde la iglesia católica hay preocupación por los hechos de inseguridad vividos en templos e instituciones afines.
Al respecto, el sacerdote Marcelo Blanche indicó que “nos fue bien, se aumentó la recaudación con respecto al año pasado, tenemos que agregar el tema inflacionario, este dinero que se recibe de la gente, vuelve a ella, pero las cosas aumentaron y si bien es más que antes, todo subió de precio”.
Luego, sobre lo recaudado, el cura dijo que “en Santa Fe se hace de dos maneras, en las misas y en la colecta domiciliaria, hubo casi 43.000.000 de pesos, de eso una parte queda en las comunidades parroquiales y sede diocesana. La manera ordinaria es para las necesidades propias de las parroquias que precisan ayuda y la extraordinaria, una necesidad urgente como por ejemplo cuando una casa se incendia, la familia pierde todo y hay que salir a cubrir esa necesidad”.
En relación con los hechos de inseguridad, Blance afirmó que “nos ha tocado que salones de Cáritas, casas parroquiales, iglesias, escuelas religiosas, capillas, han sido vandalizados y sufrieron inseguridad. Tratamos de ver mejor seguridad: rejas, alarmas y en algunos casos hasta cámaras” y agregó que “han robado imágenes, esculturas, en Santo Tomé, en la Parroquia Inmaculada, una imagen de la Virgen de Guadalupe, el valor económico no es tanto, duele lo devocional”.