En medio de la polémica y las denuncias de la oposición vinculadas al escrutinio provisorio de las elecciones primarias, el gobierno nacional aceptó la designación de veedores judiciales para garantizar la transparencia de los comicios.
En un escrito entregado este miércoles a la jueza nacional electoral, María Servini, en respuesta a un amparo promovido por el Frente de Todos, el Ministerio del Interior rechazó las acusaciones y aseguró que no tiene objeciones a la idea de que se designen funcionarios judiciales para que fiscalicen el conteo de votos.
"Sin perjuicio de tratarse de procedimientos de competencia exclusiva y excluyente del Poder Ejecutivo y a fin de garantizar la transparencia del proceso eleccionario, mi representada no encuentra objeción a la designación de veedores judiciales que puedan presenciar todos los procesos técnicos de escrutinio el día de la elección", precisó el abogado que representa al Estado Nacional, Alejandro Amaro.
Esta mañana los representantes del gobierno nacional habían entregado el código fuente del software que se utilizará durante las PASO a la Cámara Nacional Electoral e hicieron una demostración ante los apoderados del resto de los partidos. Fuentes oficiales involucradas en la organización las elecciones aseguraron que con este escrito dieron por terminada la polémica a la espera de una respuesta de la jueza federal con competencia electoral.
En el descargo de 38 páginas al que accedió Infobae, el Ejecutivo rechazó además la pretensión de dejar sin efecto la digitalización de telegramas prevista para acelerar la difusión de los resultados y defendió la contratación de la empresa que estará a cargo de ese procedimiento, Samarmatic.
"El cuestionamiento que hubo fue y es de índole política y son de público y notorio conocimiento, pero las discrepancias políticas no son suficientes para acudir ante el Poder Judicial", subrayó.
El Gobierno resaltó además que en 2017 no hubo manipulación de los resultados de las elecciones primarias legislativas -dieron como ganador a Cambiemos en la provincia de Buenos Aires cuando en realidad había perdido-, sino que "la heterogeneidad geográfica del voto produjo un sesgo en los resultados iniciales que con el avance de la carga terminó siendo neutralizado o revertido".
Fuente: Infobae