Las principales cámaras empresarias y la CGT manifestaron este martes su apoyo al acuerdo que alcanzó el Gobierno con el Fondo Monetario Internacional y pidieron al Congreso “no caer en default”, además que plantearon el programa plurianual como “un punto de partida” para la economía de los próximos años.
El presidente de la Unión Industrial Argentina (UIA) Daniel Funes de Rioja comentó que “el mundo aún atraviesa una pandemia sanitaria, se sumó una pandemia bélica cuyas consecuencias se suman de manera vertiginosa en impactos que no solo son autónomos sino interrelacionados y que van a afectar nuestra realidad y expectativas, del país y del mundo. Por eso hace complejo el proceso de recuperación económica con inclusión social a la que legitimamente aspiramos”.
“Tenemos la necesidad de una Argentina productiva, federal, integrada, productiva y competitiva. Hemos trabajado con todas las áreas del Gobierno nacional para superar todas las consecuencias de la pandemia. Frente a todas las incertidumbres, debemos tratar de esforzarnos para despejar los problemas que el país arrastra: pobreza 40,6 %, desocupación 9,3 por cieto. Es un esfuerzo que debemos hacer todos”, consideró y cerró: “Tenemos que cerrar el problema de la deuda, no podemos caer en el default, para eso hay que pensar en empleo, en producción, en exportación, hay espacios para eso, es una convicción no un deseo, pero necesitamos políticas de Estado”.
Por su parte, el presidente de la Cámara Argentina de la Construcción (Camarco) Gustavo Weiss, dijo que “el acuerdo es superior a cualquier alternativa sobre la mesa. Señalamos con agrado que uno de los fundamentos que se mencionan en el acuerdo es que la inversión en infraestructura, económica y social, aumenta respecto de años anteriroes. Es inusual, cada vez que hubo acuerdos con el FMI lo primero que se restringe es el gasto, y lo más fácil es el gasto de capital”, celebró.
A su turno, Nicolás Pino, presidente de la Sociedad Rural, aseguró: “Estamos convencidos desde el campo que mucho peor que este acuerdo es un escenario de default. La Argentina si se toma esta decisión debe aprovechar la postergación de los vencimientos para instrumentar un mecanismo que permita mayor desarrollo económico en base a la inversión y el empleo. Hay que dar impulso a políticas que mejoren las expectativas y ordenar la economía bajando el gasto público y sí o sí bajar la inflación, y reducir la presión tributaria”.
En tanto que Mario Grinman, presidente de la Cámara Argentina de Comercio (CAC), dijo que la entidad que preside “respeta los acuerdos”. “No porque consideremos que el acuerdo con el FMI solucione todos nuestros problemas. Pero no acordar iba a ser muchísimo más gravoso para los argentinos, especialmente para los que menos tienen. Hay que patear para adelante un poco y hacer las cosas que hay que hacer”, consideró.
El titular de la Asociación de Bancos Argentinos (Adeba) Javier Bolzico, comentó ante la comisión: “Expresamos nuestro reconocimiento al Poder Ejecutivo por los esfuerzos que hicieron para alcanzar un acuerdo técnico. La refinanciación per se no soluciona los problemas, pero sí genera las condiciones para que puedan ser abordados. No estar en cesación de pagos. Un default agravaría todos los problemas que tenemos y nos alejaría más de una solución. Casi inmediatamente se traduciría en mayor pobreza e inflación. Sería casi parecido a que a la Argentina la sacaran del sistema Swift, ese nivel de aislamiento”, en referencia a la sanción económica que impuso Europa y Estados Unidos a Rusia por la invasión a Ucrania.
Por su lado, el presidente de la Bolsa de Comercio de Buenos Aires Adelmo Gabbi, reflexionó: “Hoy escuchamos todos los días de quién es la culpa. Yo les digo: todos los argentinos de todos los partidos políticos hemos sido culpables de alguna manera de esta deuda. Es fundamental un plan económico, no podemos seguir pensando que vamos a acordar con el FMI para después no cumplir ninguna de las cosas que firmamos”.
La Asociación de Bancos de la Argentina (ABA), por su parte, manifestó que “el aval legislativo del acuerdo resulta fundamental no sólo para el cumplimiento de las obligaciones nacionales en el exterior sino, principalmente, para mejorar el acceso al crédito de familias y empresas locales”, dijo la entidad en un comunicado.
“Un revés en el Congreso Nacional llevará a una cesación de pagos (default) que agravará las condiciones sociales de nuestro país, aumentando el elevado nivel de pobreza, inflación y estancamiento. Por este motivo, pedimos a todos los legisladores realicen los mayores esfuerzos para sortear diferencias y avanzar en la mejor solución posible”, concluyeron.
El cosecretario general de la Confederación General del Trabajo (CGT) Héctor Daer manifestó su apoyo de la central sindical al acuerdo con el FMI. Fue uno de los dirigentes gremiales presentes en el plenario de las comisiones de Presupuesto y Hacienda y de Finanzas de la Cámara de Diputados acompañado por el titular del gremio de estaciones de servicio Carlos Acuña, también cosecretario general de la CGT. El camionero Pablo Moyano, el tercer integrante del triunvirato que conduce la central sindical, estuvo ausente.
“Nuestra posición es acompañar este acuerdo”, enfatizó Daer. Al respecto, destacó que “es la primera vez en la historia de las discusiones con el Fondo que un acuerdo no se hace con el lomo de los derechos de los trabajadores”. En un breve discurso, el titular del sindicato de Sanidad, aclaró que “no hay acuerdo con el Fondo que se pueda festejar” y aseguró que “esto es salir de la tragedia y encontrar un punto de partida y de proyección”.
“En nuestra Argentina tenemos que encarar un proceso de desarrollo, arrancando con un proceso de estabilización que no pase por el lomo de los que menos tienen”, insistió Daer. El sindicalista aseveró que la CGT está “reeditando la responsabilidad histórica de encontrar soluciones a los problemas que tuvo y tiene nuestro país”. “No andamos por la vida dejando testimonio. No estamos mirando las cosas desde un balcón. Creemos que este acuerdo al que llegó nuestro gobierno es el mejor al que se podía llegar para no caer definitivamente en el default”, añadió.
Más temprano también habían expuesto el secretario general de la CTA autónoma Ricardo Peidró, que fue muy crítico del acuerdo. “El Congreso no puede validar el endeudamiento macrista, ni eludir las denuncias sobre irregularidades e ilícitos cometidos por el Fondo Monetario Internacional”, dijo el dirigente gremial.
Fuente: Infobae