El papa Francisco aseguró este lunes que visitará la Argentina "cuando se dé la oportunidad" y afirmó que pensaba viajar al país en 2017 pero debió cancelarlo.
"Cuando se dé la oportunidad se deberá hacer. Argentina, Uruguay y el sur de Brasil, ya que hay una similitud cultural", planteó el pontífice en relación a un eventual viaje a su país de nacimiento, al ser consultado en la conferencia de prensa que ofreció en el avión en el que regresó este lunes a Roma desde Bagdad, con la presencia del enviado especial de la agencia Télam.
"Yo quiero decirlo, para que no se hagan fantasías de patria-fobia", enfatizó el Papa, que estuvo acompañado durante toda la gira por diversos medios, entre ellos la agencia nacional de noticias.
El pontífice recordó que en 2017 "estaba programado" un viaje a Argentina, Chile y Uruguay a fines de noviembre, pero explicó que se canceló por las elecciones en el país transandino, y se pospuso a enero.
Sin embargo, a causa de las vacaciones de verano, "no era posible" ir a la Argentina y Uruguay en enero de 2018, porque "es como nuestro julio y agosto", agregó, en relación al período de vacaciones de Italia.
Finalmente, Francisco visitó Chile en enero de 2018 junto a Perú, que fue agregado a la gira "porque había sido dejado de lado del viaje a Ecuador, Paraguay y Bolivia" de 2015, explicó.
El Papa planteó además que, cuando le preguntan por su regreso al país, responde con humor. "Suelo decir de forma irónica que ya estuve 76 años. ¿Es suficiente, no?", dijo.
Elegido el Papa 266 de la Iglesia en marzo de 2013, Francisco nunca visitó como pontífice Argentina ni Uruguay, y en Brasil solo fue a Río de Janeiro y Aparecida para la celebración de la Jornada Mundial de la Juventud de julio de 2013.
En su primera conferencia de prensa en 15 meses, el pontífice aseveró además que, si renuncia al pontificado, no volverá a la Argentina sino que se quedará en Vaticano.
"Yo no pienso volver a la Argentina sino que me quedaré en mi diócesis", aseguró en relación a Roma, ciudad de la que es obispo.
Jorge Bergoglio, de 84 años, reconoció durante el diálogo de casi una hora con los periodistas que en el viaje a Irak se cansó "mucho más que en otros".
"En este viaje me cansé mucho más que en los otros. Los 84 años no vienen solos", agregó el Papa, afectado por una ciática crónica que en diciembre y enero lo obligó a suspender celebraciones en el Vaticano, y que durante la histórica gira por Irak mostró dificultades para caminar al hacer largos desplazamientos.
Francisco regresó este lunes a Roma desde Irak tras una gira en la que recorrió la capital Bagdad, el Sur, el Norte y el Kurdistán iraquí con mensajes por la unidad nacional, el rechazo al terrorismo y el apoyo a las comunidades cristianas perseguidas por la milicia Estado Islámico entre 2014 y 2017.
En su primer viaje desde noviembre de 2019, el Papa afirmó que la ida a Irak no fue "un capricho" en medio del alza de casos de coronavirus en el país sino que fue "un paso" en su acercamiento al islam.
"Tantas veces se debe arriesgar para dar este paso. Usted sabe que hay algunas criticas de que el Papa no tiene coraje, que es un inconsciente y está haciendo pasos contra la doctrina católica, con un riesgo de herejía. Son riesgos, pero estas decisiones se toman siempre en oración, en diálogo, pidiendo consejo. Estas elecciones no son un capricho", argumentó al ser consultado por los riesgos del viaje.
El Papa reconoció además que la pandemia de coronavirus era una de las cosas que más lo hacía dudar antes de la visita, pero que encomendó la salud de la gente a la oración.
"Pensé tanto, recé tanto. Y al final, tomé la decisión, libremente, pero que venia de adentro", planteó Francisco consultado por el riesgo epidemiológico de su visita, en un marco en el que el Gobierno iraquí había decretado toque de queda para evita al difusión de la enfermedad.
"Yo dije que el que me hace decidir así, se ocupe de la gente", sostuvo en referencia a sus oraciones. "Así tomé la decisión. Después de la oración, y conociendo los riesgos", sostuvo.
Fuente: Télam