Por Juan Trento
Esta mañana, en calle Reynares al al 9700 en el extremo noroeste de la capital santafesina, hallaron muerto y semidesnudo a un hombre tirado en la calle con losetas sobre su cabeza como también una hoja metálica de cuchillo quebrada. El médico policial constató golpes en la cabeza con traumatismos que se producen por un tercero que los ejecuta. Con esa aseveración queda descartado el suicio y se está en presencia de un asesinato. La víctima aún no fue identificada. Posteriormente ubicaron huellas de arrastramiento del cuerpo con vida y sin conocimiento, o asesinado. La especulación policial indiciaria señala que el crimen fue cometido en otro lugar y posteriormente él o los asesinos lo arrojaron en la calle.
Presunto homicidio
Con las primeras luces del amanecer, los vecinos y ocasionales transeúntes de una calle de tierra, observaron el cuerpo semidesnudo e inmóvil de una persona, y lo denunciaron a la central de emergencias 911. Algunos minutos después arribaron oficiales y suboficiales de Orden Público y de Cuerpos, que constataron la veracidad de la denuncia y preservaron el lugar hasta la llegada del médico de la repartición policial. El profesional arribó luego, y constató que la víctima tenía pedazos de loseta sobre la cabeza, manchas de sangre, y del lugar secuestraron un cuchillo con su hoja rota. Se trata de una muerte violenta ocurrida durante la madrugada. Y un elemento que no pasó desapercibido para los investigadores policiales de Orden Público y Cuerpos que actuaron en el caso en primera instancia: las huellas de arrastramiento del cuerpo son de unos 100 metros, compatibles con la hipótesis que la víctima fue asesinada en otro lugar y arrojado en el lugar del hallazgo. Posteriormente fueron informados del caso los pesquisas de Homicidios de la AIC, que se hicieron presentes en el lugar e iniciaron la investigación.
Peritajes criminalísticos
Informaron la novedad sobre la ocurrencia del hallazgo, el informe del médico policial a las Jefaturas de la Unidad Regional I La Capital y la AIC, ambas de la Policía de Santa Fe, y éstos hicieron lo propio con los fiscales de la unidad especial de Homicidios del Ministerio Público de la Acusación, que ordenaron que el cadáver sea llevado a la morgue judicial santafesina. Asimismo ordenó la realización de los peritajes criminalísticos de rigor, los que fueron ejecutados por los agentes del área Científica de la Agencia de Investigación Criminal AIC.
