El decreto de congelamiento de alquileres y prohibición de desalojos, que estuvo vigente durante un año, concluye este miércoles y el Gobierno nacional pone en marcha un protocolo para asistir a las familias con problemas habitacionales. Distintas organizaciones de defensa de inquilinos en todo el país reclamaron por la extensión de la medida y nuevos acuerdos para ayudar a pagar deudas en más de 12 cuotas.
Con todo, a partir de este jueves 1 de abril, los contratos podrán actualizarse y las familias que hayan acumulado deuda deberán acordar planes de pago de hasta 12 cuotas contemplados en la normativa o enfrentar juicios de desalojo.
Previo a esto, el Gobierno implementó la obligatoriedad de registrar los contratos de alquiler en la Administración Federal de Ingresos Públicos (Afip), lo cual de no cumplirse es un impedimento para el propietario en caso de querer avanzar en un desalojo. Además, esta semana se creó el Protocolo de Riesgo Temprano de Desalojo, con el objetivo de asistir a las familias que se encuentren en situación de desalojo ante el inminente vencimiento del decreto.
En diálogo con Veo Noticias, Walter Govone, integrante de la Federación de Inquilinos de Santa Fe, expresó: "A partir de mañana vence el DNU del congelamiento y de los desalojos. Lo vemos con total normalidad a este vencimiento despuñes del anuncio de hace 15 días atrás, por eso se empezó a trabajar en todos los contratos".
"El relevamiento a través de la Federación de Inquilinos arroja que hay un porcentaje del 4% de incumplimiento de pago y un 3% de aquellos que están atrasados en el pago. Son valores que están dentro de la media de morosidad en épocas normales, por eso no vemos con preocupación el vencimiento del DNU", agregó.
Por otra parte sostuvo que "no información de desalojos en la ciudad y en la región por incumplimientos de pago. Si puede haber juicios por temas anteriores".
En tanto, Ariel Dorazio, de la Federación de Inquilinos, sostuvo que "llama la atención que el Gobierno no priorice proteger a un sector que viene siendo muy castigado, sobre todo en el marco de la emergencia sanitaria que vivimos, en un momento donde se analiza endurecer las restricciones por la cepa de Manaos. Que se abandone a los inquilinos que ya vienen arrastrando deudas durante este tiempo y se libere a que el mercado regule plenamente el acceso a la vivienda, nos parece que si un plan alternativo para sacar a los inquilinos del endeudamiento es, por lo menos, descabellado".
