La ciudad de Santa Fe vivió una madrugada de miércoles marcada por la inseguridad y el vandalismo, con una seguidilla de ataques a comercios que compartieron un mismo modus operandi: la rotura de sus vidrieras. Los hechos, registrados en distintos puntos de la capital, generaron alarma entre los vecinos y comerciantes.
La ola de ataques parece haber sido indiscriminada, afectando tanto a negocios en funcionamiento como a locales vacíos, y abarcando una amplia zona geográfica. Los puntos confirmados son:
- Avenida General Paz al 5200: El local de indumentaria “Barrio Norte” sufrió la rotura de su blindex y el posterior robo de mercadería.
- Gorriti y Peñaloza: Un importante comercio mayorista ubicado en esa esquina clave de la zona norte también amaneció con su vidriera estallada.
- Lavalle y Gobernador Candioti: En el corazón de Candioti Sur, un local gastronómico fue blanco del vandalismo. Este hecho genera mayor preocupación en el barrio, ya que, según reportes, a solo una cuadra de allí se había detenido la noche anterior a un hombre con heridas cortantes, y se investiga si existe alguna relación entre los eventos.
- Urquiza y La Rioja: En pleno macrocentro, la vidriera de un local comercial que hasta hace poco albergaba una panadería y que actualmente se encuentra desocupado, también fue completamente destrozada.
Daniel, propietario del local de indumentaria Barrio Norte, relató en diálogo con Veo Noticias cómo se enteró del hecho. “Me llamó la chica que vive en el departamento de arriba a las 2:30 de la mañana, diciendo que había escuchado un ruido fuerte”, explicó. La vecina no se animó a bajar por temor. “Así me vine y me encontré con la vidriera destrozada”, relató Daniel.
El dueño describió la violencia del impacto: “Es un vidrio que tienen 10 milímetros, creo que le habrán dado puntadas para que estalle”.
Los delincuentes no solo causaron el daño, sino que aprovecharon para robar. “Se llevaron parte de lo que estaba en la vidriera; había muchas prendas, de calidad y marca”, detalló el comerciante.
Más allá del robo, Daniel expresó la frustración que comparten muchos colegas de la zona. “Es una zona linda, muy linda, pero la verdad que en los últimos tiempos varios comercios de la avenida han sufrido robos”, aseguró.
Finalmente, lamentó el impacto económico del ataque, que va más allá de la mercadería sustraída. El comerciante debe ahora afrontar el elevado gasto de reponer un vidrio de gran tamaño y grosor, en medio de una situación de ventas que, según describió, es crítica para el sector comercial.
La policía investiga los hechos y analiza las cámaras de seguridad de las distintas zonas para determinar si los ataques fueron perpetrados por los mismos autores en el marco de un raid delictivo.
