La Justicia investiga un grave ataque ocurrido el jueves de Navidad en la zona norte de Rosario, donde un joven de 22 años en situación de calle fue rociado con combustible y prendido fuego, sufriendo quemaduras en el 35 por ciento de su cuerpo. Por el hecho, los principales sospechosos son dos adolescentes de 13 años, uno de ellos hijo de la propietaria de la vivienda frente a la cual ocurrió el episodio.
De acuerdo a la información oficial, la víctima, identificada como David, fue hallada con severas lesiones en el pecho, el abdomen y uno de sus brazos, cerca del ingreso a una casa ubicada en French al 2000. Personal policial acudió al lugar tras un llamado de emergencia y encontró al joven con evidentes signos de quemaduras.
Según el testimonio de la dueña del inmueble, su hijo y un amigo, ambos de 13 años, habrían participado del ataque. Sin embargo, el segundo menor involucrado negó haber provocado el incendio y sostuvo que intentó apagar las llamas junto a otras personas que se encontraban en el lugar.
David fue trasladado de urgencia al Hospital de Emergencias Clemente Álvarez (Heca), donde ingresó cerca del mediodía. Allí, los médicos diagnosticaron quemaduras de tipo A y B en el 35% de su cuerpo, y permanece internado bajo estricta observación médica.
La causa quedó a cargo del fiscal de Menores, Ernesto Ducasse, quien ordenó la toma de testimonios y dispuso que el principal acusado permanezca bajo resguardo de su madre mientras avanza la investigación. Además, se secuestraron en el lugar una botella y un encendedor, elementos que habrían sido utilizados para cometer la agresión.
El hecho generó conmoción en el barrio y volvió a poner en foco la violencia extrema y la situación de vulnerabilidad de las personas en situación de calle, mientras la Justicia intenta determinar las responsabilidades y las circunstancias exactas del ataque.
