La cantidad de niños que trabajan se eleva actualmente a 160 millones en todo el mundo, tras un aumento de 8,4 millones en los últimos cuatro años, y varios millones de niños más se encuentran en situación de riesgo debido a los efectos de la COVID-19, según se desprende de los resultados de un nuevo informe conjunto de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) y UNICEF.
Argentina no es la excepción y se habla que el trabajo infantil se incrementó en un 46%.
En diálogo con Veo Noticias, Patricia Chialvo, secretaria de Derechos de la Niñez, contó que Santa Fe no fue la excepción y que desde la secretaria realizan un intenso trabajo para detectar trabajo infantil ilegal.
"Cuando hablamos de trabajo infantil hablamos mucho de trabajo rural o mucho de trabajo en galpones o establecimientos de producción. Tenemos muchas situaciones de trabajo infantil que están solapadas en otras situaciones como los chicos que están en carro cirujeando y lo más grave con la explotación sexual", expresó Chialvo. Además agregó que "estamos muy preocupados por la creciente gravedad de las situaciones".
"Las situaciones no llegan en mayor estado de gravedad a partir de la pandemia, porque el hecho de estar encerrados evita que los chicos puedan estar contando estos hechos. Por eso cuando llegan ya son situaciones graves que tienen que ver con abusos o violación o con embarazados muy precoz", aportó.
Asimismo, Chialvo consideró que "la pandemia no ha ayudado a esto. Por otro lado tiene que ver con naturalizaciones de estas situaciones en las comunidades donde se dan, se lee como normal o común que haya mayor trabajo infantil".
"En algunos lugares vemos mucho trabajo rural, en otros hay explotación sexual que es lo que más nos preocupa. Si hay este tipo de cosas es porque hay gente que los sostiene y que tienen recursos económicos para fomentar este tipo de actividades", concluyó.