Al igual que la iglesia católica, desde la evangélica también expresaron su preocupación por la constante situación de inseguridad y violencia que se vive en la ciudad de Santa Fe, que recrudeció en las últimas semanas.
El pastor evangélico Andrés Garzón manifestó que "nos preocupa como comunidad evangélica los hechos de inseguridad que se están viviendo y que vienen de larga data, parece que en estos últimos días se han multiplicado".
"La situación es compleja, uno ve la marginación, el Estado ha intentado por diversos medios de llegar a la gente que está pasando necesidad pero parece que ese esfuerzo no alcanza. Vemos a diario con qué problemas y dolor llega la gente, tratamos de paliar esa situación pero lo de la inseguridad no lo hemos visto nunca, ha empeorado", agregó.
"Uno ve jóvenes que han perdido las esperanzas, sin oportunidades, niños de 8 años alcoholizados. Eso lleva a una mayor decadencia, se han perdido los principios y los valores. Tratamos de rescatarlos pero vemos que el esfuerzo parece no alcanzar", finalizó.
