El constante hurto de medidores de agua continúa siendo un problema preocupante tanto para los usuarios del servicio como para la empresa Aguas Santafesinas (ASSA), que se ve obligada a brindar respuestas ante cada acto de robo o vandalismo de este tipo.
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Durante enero, se presentaron 14 denuncias de usuarios que reportaron el robo de sus medidores, una cifra que, según Aguas Santafesinas, es considerada "baja pero no ideal". Sin embargo, este número palidece en comparación con la situación en Rafaela, donde se registraron 52 denuncias de robos de medidores durante el mismo período.
En cuanto a los costos y el valor de los dispositivos, es importante señalar que la mayoría de los componentes están hechos de aleaciones metálicas no ferrosas, aunque hay acoples a las cañerías que son de bronce. Aguas Santafesinas (ASSA) buscando reemplazar estos acoples por materiales plásticos para disminuir su atractivo para los delincuentes.
En la actualidad, reemplazar un medidor cuesta alrededor de 50 mil pesos. Desde abril del año pasado, la empresa tomó medidas al respecto y optó por instalar medidores de plástico en lugar de los convencionales para disuadir los robos. Aunque estos dispositivos están compuestos por piezas plásticas de poco valor en el mercado, el delito persiste.
Qué hacer ante un robo de medidor de agua
Si alguien es víctima de un incidente de este tipo, es crucial que se ponga en contacto de inmediato con la empresa. Puede hacerlo a través del número de WhatsApp disponible las 24 horas (3416950008), la oficina virtual en la página web, o mediante la atención telefónica al 0810-777-2000.
Además, es importante que el usuario presente una denuncia al 911, ya que Aguas se encarga de realizar la correspondiente presentación ante cada incidente.
El tiempo estimado para la reposición del medidor es de 48 a 72 horas, dependiendo de la cantidad de denuncias registradas.
Si el usuario no está presente, por ejemplo, en el caso de una casa deshabitada, cualquier persona puede realizar el reclamo ante la empresa a través de los distintos canales de comunicación disponibles.
Un vecino que observe una fuga puede presentar una denuncia proporcionando la dirección de la vivienda. Luego, la empresa verifica si se trata de un robo de llave de paso, de medidor, una fuga, y si fue total o parcial.
Una vez que se ha restablecido el servicio, se procede a la reposición del medidor por uno nuevo de plástico.
