Con casi el 56% de los votos, Gabriel Boric se impuso en las elecciones en Chile y el país transandino dará un giro político desde el año que viene. Diputado de 35 años y antiguo líder estudiantil, Boric se define como ecologista, feminista y regionalista y quiere ampliar el papel del Estado hacia un modelo de bienestar parecido al de Europa. Será el presidente más izquierdista desde el gobierno del derrocado Salvador Allende y el primero que no forma parte de los dos grandes bloques que se repartieron el poder desde el retorno a la democracia en 1990.
Veo Noticias conversó con el analista internacional Juan Pablo Jullier, perteneciente al Observatorio de la UCSF, quien afirmó que "la clave para entender el triunfo está en la movilización de la gente hacia las urnas. Mucho de lo que reflejó la campaña de Boric es impulsar a que la gente vote, porque en Chile el voto no es obligatorio. Esto hizo que el triunfo haya sido bastante contundente en casi todas las regiones del país".
"En números es una victoria legitimada, en cuanto a gestión habrá que esperar porque el Congreso quedó muy fraccionado y eso lo obligará a generar acuerdos y trazar coaliciones a la hora de gobernar. Esto se da en medio de un stand by que está viviendo Chile al menos hasta mediados del año que viene porque la Convención Constituyente está en este momento redactando un nuevo texto. Habrá que esperar a que lo presente y a partir de eso existan lineamientos nuevos en el sistema político chileno", agregó Jullier.