La Federación de Sindicatos de Trabajadores Municipales de la Provincia de Santa Fe (Festram) realizó la semana pasada dos jornadas consecutivas de protesta en respuesta al descontento generado por la política salarial del gobierno provincial. Las medidas incluyeron paros en todo el territorio santafesino y cortes de ruta en tres puntos estratégicos: Ceres, la capital provincial y Capitán Bermúdez.
La decisión de protestar surgió tras lo que el gremio calificó como un “profundo malestar” con la gestión del gobernador Maximiliano Pullaro, particularmente con la actitud de varios intendentes —principalmente de extracción radical y del PRO— que resolvieron otorgar aumentos salariales por decreto, sin acuerdo en paritarias.
“Los/as trabajadores/as municipales expresamos nuestro rechazo a las políticas del Gobernador, pero en particular nuestra disconformidad con los aumentos impuestos sin negociación, una práctica que vulnera el marco legal y el respeto por las entidades sindicales”, expresó Festram a través de un comunicado oficial difundido durante las medidas de fuerza.
Tensiones en las calles
Durante las protestas, la presencia de efectivos de la policía provincial y de la Gendarmería Nacional generó preocupación entre los manifestantes. Según denunciaron desde Festram, en la ciudad de Ceres se habrían registrado actitudes “intimidatorias” por parte de las fuerzas de seguridad.
En un comunicado difundido este lunes, la organización sindical advirtió que “esta situación no puede sostenerse en el tiempo sin amenazas, coerciones y represión”, y trazó un paralelismo con la política nacional: “Las similitudes ya son obvias, más allá del cuidado de algunas formas por parte del Gobernador”, señalaron en alusión al presidente Javier Milei.
Asimismo, alertaron que un eventual endurecimiento de las protestas podría derivar en una mayor represión, manifestando su preocupación por el accionar de las fuerzas de seguridad ante posibles escaladas del conflicto.
Una lucha que continúa
Al cierre del comunicado, Festram reafirmó su compromiso con los trabajadores municipales y adelantó que, si no hay una respuesta concreta del Ejecutivo provincial, las medidas de fuerza podrían continuar. “Seguiremos defendiendo los derechos de los compañeros y compañeras que a lo largo de la Provincia resisten, pues la única lucha que se pierde es la que se abandona”, concluyó la organización.
Por ahora, el conflicto continúa abierto, en un contexto de creciente tensión entre los municipios, el gobierno provincial y los gremios que representan a los trabajadores municipales.


