La victoria de Boca ante Caracas no fue para nada intrascendente. Si bien el conjunto de Miguel Ángel Russo ya estaba clasificado y el encuentro fue por la última fecha de la fase de grupos de la Copa Libertadores, este triunfo le daría al Xeneize la posibilidad de definir de local en un hipotético cruce de cuartos de final o semifinales ante River.
El motivo de esta ventaja es que Boca finalizó primero en su grupo con 14 puntos, mientras que River solo logró 13 y por eso el Xeneize se aseguró la localía en el segundo partido ante los primeros que tengan menos unidades, como el Millonario, o quienes finalizaron segundos en sus zonas.
Por lo tanto, al igual que sucedió en 2018 y 2015, el encuentro decisivo tendría lugar en La Bombonera. Igualmente, para que se crucen se deben dar coincidencias previas, como por ejemplo que ambos queden en el mismo lado del cuadro luego del sorteo para los octavos de final.
Sin embargo, pese a esta buena noticia para el mundo Boca hay una probabilidad que puede traer suspicacias porque, en un posible enfrentamiento en cuartos de final, el partido de ida podría jugarse el 9 de diciembre, ya que los primeros encuentros de esa instancia se disputará entre el 8 y 11 de noviembre.
