El pasado sábado en una íntima ceremonia, familiares y amigos de Juan Pablo Cano despiedieron sus restos en la cochería La Española de Santo Tomé. Con su cuerpo cremado en Perú y con los interminables trámites terminados, el montañista recibió el último adios. Al otro día, su mamá Zulma, se expresó a traves de un mensaje dedicado a quienes ayudaron al rescate de los cuerpos del joven santotomesino y de Ian, el barilochense que había escalado con él la cordillera peruana en Huaraz. "Como lo hicimos en un principio, por este medio queremos transmitir nuestro INFINITO AGRADECIMIENTO a todos los que se hicieron presente de una u otra manera ante esta dolorosa situación", escribió la mujer. "En primer lugar, a los amigos de Juan y los rescatistas que con inmenso AMOR y SOLIDARIDAD pusieron en riesgo sus vidas y nos devolvieron a Juan y a Ian para poder duelarlos en paz", continuó y realizó una extensa mención de nombres.
En otro párrafo, agradeció "profundamente a amigos, allegados de Juampi y de la familia así como a personas que simplemente empatizaron con la causa, que desinteresadamente permitieron cubrir los gastos operativos para que Juan vuelva a Argentina y reconocer la intervención de personas y organismos que desde su lugar y sus posibilidades, favorecieron a la rápida resolución de la situación y/o quitaron los aranceles habituales, lo cual derivó en que el dinero total necesario sea inmensamente menor y que tengamos a Juan lo más rápido posible en Santa Fe". En este caso incluyó en la lista al secretario de Protección Civil de Santa Fe, Marcos Escajadillo y al Senador Provincial Lisandro Enrico.
"Es una historia muy triste y sin final feliz, pero es una historia de vida, una historia de amor."... de amor infinito por sus montañas!", finalizó.
