El presidente de Unión, Luis Spahn, salió a aclarar lo ocurrido luego de estar presente en la audiencia imputativa en su contra por administración fraudulenta al frente de la institución Tatengue, que tuvo lugar este miércoles en el Ministerio Público de la Acusación. A través de un largo audio que difundió al "mundo de los unionistas", el dirigente salió a explicar en detalle la situación de la denuncia. “En principio, les digo que tengo la conciencia tranquila por la honestidad con la que obré, tengo tranquilidad por el proceder de las personas afectadas en este hecho” comenzó indicando el dirigente.
Luego, aclaró que la imputación tiene origen en los allanamientos realizados hace 27 meses, a causa de que “un grupo de socios perdió la elección y a los dos meses hicieron esta denuncia”. El presidente denunció que el allanamiento fue infundado, así como el trato “persecutorio y discriminatorio”, y que buscaban “pagarés mutuos que nunca existieron”. “Toda la información pedida por el organismo fue aportada en tiempo y forma” aseguró. Asimismo, culpó a la fiscalía de “tomar una denuncia falsa y en base a eso realizar los allanamientos”.
Además, denunció irregularidades durante el proceso: “Desde la pericia química, desde que no se nos informó de las tareas del cronograma policial, se rompió la cadena de custodia de lo incautado, se llamó a identificación de parte de la comisión directiva 26 meses después. Y lo curioso es que se llamó solo a dirigentes que permanecen en actividad”. Ante esto último, aclaró que relacionar la denuncia “imaginativamente con una persecución política hacia los que seguimos en el club tiene algún asidero”. El presidente del “Tate” dio a conocer que el detalle de los cargos imputativos son “14 puntos” y aseguró que para él “todos van camino a la absolución y carecen de asidero”. En especial, destacó aquellos que tratan sobre los “subsidios” como los más “infundados”.
Sobre estos últimos, explicó que la imputación acusa que el club perdió “7 millones de pesos en distintos subsidios y que fue un perjuicio para el club”. Al respecto, contrarrestó: “Nunca reintegramos ni tuvimos que pagar ni devolver ni multas por parte de la Provincia en estos subsidios. No solo que no pagamos -demás-, sino que no debemos, estos subsidios ya están cancelados y cerrados”. Otros de los cargos, explicó el dirigente, son sobre gastos del club que pagó a través de sus empresas, ante lo que explicó: “Los cargos son por haber pagado, no porque haya aparecido alguna factura que no sea del club”. Y aseguró que cuando llegaron, el club tenía inhabilitada la cuenta corriente en el Banco Central por “la cantidad de cheques impagos de la gestión anterior” y atribuyó a eso la necesidad de cancelar deudas de la manera que lo hicieron.
Para finalizar, el presidente dedicó unas palabras al mundo Unión: “Todos los puntos los vamos a rebatir, vamos a aportar todos los elementos y para nosotros la causa tiene un solo final”. Además, lamentó que la denuncia de “tres ilustres socios” haya “manchado a la institución” y explicó que de los cuatro cargos que se le atribuyen en la denuncia, la fiscalía “solo tomó uno, el de los subsidios, que ya lo aclaré”, mientras que los otros tres fueron desestimados.