La contadora Andrea Calvet renunció el pasado viernes a la Secretaría de Hacienda y su dimisión fue aceptada por el intendente de Coronda. La profunda crisis económica que atraviesa la Municipalidad sumado a algunos problemas de salud fueron claves en la decisión.
La crisis de la Municipalidad se agudiza mes a mes y los fondos no alcanzan para poder pagar en tiempo y en forma a los empleados que mantienen un prolongado plan de lucha tras las elecciones y la derrota electoral del oficialismo.
El municipio corondino lleva dos meses de pago irregular a sus empleados con depósitos sucesivos durante el mes y pedidos de adelanto de coparticipación a la provincia. Los trabajadores ya decidieron -además de las huelgas- un par de presencias en la ruta para reclamar por sus haberes.
Calvet no fue la única que presentó su renuncia. También lo había hecho la Secretaria de Cultura, Ileana Albornoz tras las elecciones pero el intendente decidió continuar con su gabinete en pleno. Luego de aquella determinación la titular de ese área decidió no percibir la diferencia salarial como funcionaria ya que también es empleada municipal.